Película de 2020 dirigida por Aneesh Chaganty. Una madre ha criado en solitario a su hija que ha tenido múltiples problemas de salud desde el nacimiento. Ello hace que necesite muchos cuidados y adaptaciones pero la madre ha estado muy dedicada. Se acerca la fecha de ir a la universidad y, aunque la madre expresa su seguridad sobre la capacidad de la niña, no parece que sea sincera. Y la niña empieza a sospechar justo esto y empieza a temer que hay algo oculto.
Thriller psicológico coescrito y dirigido por Chaganty que se mueve entre el suspense y el terror que puede llegar a provocar el amor de una madre mal entendido. Es algo predecible pero la tensión creciente y la atmósfera que tiene son suficientemente buenas para tener al espectador enganchado. Por lo tanto, funciona la fórmula que, en buena medida, es bastante clásica y se aleja del terror habitual comercial; muy pocos personajes y un escenario que es parte de la historia. Chaganty va jugando bien sus cartas y se apoya en la buena interpretación de las dos mujeres protagonistas, Sarah Paulson y la joven Kiera Allen (primera persona en silla de ruedas en protagonizar una película en muchos años).
Buena
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