Película de 1983 dirigida por Michael Apted. Aparecen tres cadáveres en el parque Gorky de Moscú con la extraña y desagradable circunstancia de que les han quitado los rostros. Le encargan la investigación al mejor detective de la policía aunque sufre desde el inicio la interferencia de la KGB. A esto se le suma la dificultad de identificar a los cadáveres por las mutilaciones sufridas, por lo que es un caso muy complicado. Conforme avanza en sus investigaciones se va convenciendo de que hay involucradas personas de las altas esferas políticas junto a un americano contrabandista.
Thriller con tintes de espionaje en plena Guerra Fría basada en la novela homónima de Martin Cruz Smith, primera de las siete escritas sobre el detective Arkady Renko. La trama policial está bastante bien aunque no está suficientemente desarrollada la investigación como para ir sacando las conclusiones del propio investigador. Pero el punto más débil es el innecesario, previsible y absurdo romance que sólo resta tiempo y credibilidad al argumento principal. El reparto es solvente y funciona bien, con William Hurt y Lee Marvin a la cabeza y acompañados por Brian Dennehy, Michael Elphick y Joanna Pacula. El resultado es entretenido pero deja una mala sensación porque las expectativas iniciales tras los primeros minutos quedan lejos de cubrirse.
Entretenida pero decepcionante.
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