Película de 2013 dirigida por David Soren. Un caracol que trabaja en un huerto tradicional sueña con convertirse en un bólido de carreras. Un día es absorbido por un coche de competición y adquiere unos extraños poderes que le asemejan a éste, incluso en la velocidad que puede alcanzar. Casualmente topa con un joven que es aficionado a las carreras de caracoles y descubre sus posibilidades. Tanta es la confianza que tienen ambos que intentarán apuntarse a las 500 millas de Indianápolis y retar al legendario campeón actual.
Simpática comedia de dibujos animados de la Dreamworks sobre un caracol tan veloz que quiere competir contra coches, por lo que a muchos le recordará a la estupenda Cars. Aunque la trama principal es previsible, las diferentes aventuras y situaciones por las que va pasando el protagonista son originales y divertidas para toda la familia, pero sin duda que son los peques los que disfrutan enormemente durante toda la cinta. Técnicamente está bastante conseguida y el aspecto visual es atractivo, con unos personajes interesantes y situaciones trepidantes y cómicas, por lo que es un buen entretenimiento.
Divertida.
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