Película de 2008 dirigida por Craig Pryce. Una joven llega a un pueblo muy conservador y habita una casa conocida como la casa gris conocida por creer que hay fantasmas en ella. Desde el primer momento resulta ser una chica que sorprende por sus habilidades y misterio, por lo que pronto pensarán que se trata de una bruja. Mientras el jefe de policía se va enamorando, la mujer del alcalde tratará de boicotear su tienda para que abandone el pueblo.
Producción canadiense para la televisión que supuso la primera entrega de una exitosa saga sobre una joven que tiene ciertas habilidades que la confunden con una bruja, aunque buena. La película es muy sencilla y humilde, lo que se deja notar en su realización. La historia es muy simple y predecible, pero tierna y bienintencionada, además de hábil en su concepción porque consigue captar a los niños sin enseñar trucos de magia, monstruos o espectaculares efectos especiales. A los adultos les resultará algo sosa pero entretenida si se dejan llevar y no son muy críticos con lo que ven. Destaca la simpática Catherine Bell como la protagonista.
Sencilla cinta infantil.
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