Película de 1988 dirigida por John McTiernan. Tras varios meses separados por el trabajo, un policía de NY va a Los Ángeles a pasar la Navidad con su esposa e hijos que aquí viven tras una importante promoción laboral. Llega a la oficina justo mientras celebran la fiesta de Navidad y poco antes de que entren unos terroristas y los tomen como rehenes. Rápidamente puede descubrir que no dudan en matar así que intenta llamar a la policía mientras juega al gato y al ratón con ellos.
Clásico de acción de los ochenta que lanzó la estrellato de Hollywood a su protagonista, Bruce Willis, del que no se ha bajado aún. Tuvo mucho éxito y no sólo tuvo hasta cuatro secuelas más sino que se copió la historia muchas veces (algunas con éxito cambiando el rascacielos por un barco o un avión). Son varios los motivos que contribuyen a que triunfara, como la mezcla de acción con detalles de humor (aquí Willis lo clava), la aventura que no para, el suspense, las escenas espectaculares tanto por luchas como por efectos especiales, etc. Cuenta con el ya tristemente desaparecido Alan Rickman como el "malo", lo que hace muy bien. Todo ello la convirtió en una cinta de culto que se sigue viendo con interés porque es tan actual como en su momento.
Buena.
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