Película de 2015 dirigida por M. Night Shyamalan. Tras muchos años sin contacto, un madre de dos hijos decide darle la oportunidad a sus padres de conocer a sus nietos. Por ello, los manda a pasar una semana con ellos mientras ella aprovecha para irse a un crucero con un novio, siendo la primera oportunidad de recuperar cierta felicidad desde que su esposo le dejó. Los niños viajan en tren y comienzan así una semana que esperan con ganas tanto por ellos como por su propia madre, aprovechando la hija mayor para hacer un documental para el colegio sobre esta aventura de conocer por primera vez a sus abuelos. Aunque todo comienza muy bien pronto empiezan a ver algunos comportamientos extraños.
Otro relato de Shyamalan de suspense aunque esta vez se acerca al terror con una inquietante historia de abuelos y nietos. La trama tiene su sello personal pero el estilo de realización es totalmente distinto pues utiliza la excusa de que uno de los protagonistas está grabando lo que sucede para hacer un documental para tomar al 100% este punto de vista. Es decir, utiliza ese estilo de otras cintas de terror que tanto éxito han tenido. Esto le da como más realismo y acerca al espectador a los protagonistas, pero también cansa ese movimiento de cámara tan característico. Utiliza muy bien los recursos clásicos del género como no mostrar todo lo que ocurre para dar rienda suelta al espectador, pero no lo aprovecha en todo su potencial. El reparto es muy reducido y sin estrellas conocidas, pero funciona bien.
Entretenida.
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