Película de 2009 dirigida por Tony Scott. Lo que parece un día convencional en el centro de control del metro de Nueva York se convierte en una locura cuando unos asaltantes toman un tren con rehenes y piden un rescate millonario en una hora. El líder negocia con un despachador y no acepta otro interlocutor, tanto que hasta la policía empieza a dudar de su implicación en el caso.
Nueva adaptación de la novela homónima de Morton Freedgood sobre un secuestro en el metro de NY para pedir dinero a cambio de la liberación de los rehenes. Es intensa en general aunque acelera por momentos, más en la tensión de los caracteres y algunas secuencias que por la acción en general. No es predecible salvo a muy grandes rasgos, y establece un duelo entre los protagonistas interesante. Todo ello la hace muy entretenida y tiene buenos momentos. Cuenta con una buena pareja protagonista con Denzel Washington y John Travolta y secudarios de lujo como John Turturro, James Gandolfini y Luis Guzman. Scott tiene claro lo que lleva entre manos y el espectador también si conoce al director, por lo que la elección depende de los gustos.
Entretenida.
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