Película de 2010 dirigida por Luis Estrada. Un hombre regresa a su pueblo natal en México después de pasar muchos años en los EE.UU. con el firme propósito de rehacer su vida de una forma normal y honrada. Pero se encuentra un panorama que no imaginaba ya que el pueblo está en medio de una guerra entre dos bandas de narcos rivales y su hermano, que trabajaba para una de ellas ha sido asesinado. Y son pocas y muy malas las formas de ganarse la vida fuera de esas bandas.
Otra cinta escrita y dirigida por Estrada que retrata una parte muy real de México con un sentido de humor negro. Más violenta que sus obras más famosas al girar sobre el narcotráfico y la violencia extrema que le rodea. Y más allá de ésta lo que muestra es cómo funciona como un maldito agujero que negro que absorbe casi sin remedio todo lo que tiene alrededor. Cuenta con actores habituales de este director mexicano como Damián Alcázar y Joaquín Cosío al frente del reparto y con buenos trabajos. Está bien realizada y con buenas localizaciones, mostrando una calidad alta en todos los aspectos. Debido a ese sarcasmo que utiliza, se puede tender a pensar que se exagera en lo que muestra, pero la verdad que se vive ahora en algunas zonas de la República nos hacen ver que (tal vez) se queda corto.
Buena.
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