Película de 2007 dirigida por Jay Russell. Un niño vive en una gran casa en Escocia junto a su madre y hermana mientras su padre ha ido a luchar en la II Guerra Mundial. Un día recogiendo conchas en la playa encuentra un extraño objeto y lo lleva a casa. Resulta se un huevo del que sale un ser muy peculiar, y decide adoptarlo. Poco después escucha la leyenda del caballo de mar, un monstruo que vive en el lago Ness y que antes de morir pone un huevo, de forma que nunca hay más de uno. Pero el ser va creciendo rápidamente por lo que resulta muy difícil mantenerlo en secreto.
Adaptación de la novela The water horse de Dick King-Smith sobre el mito del monstruo del lago Ness apta para toda la familia. Es un cuento que narra las aventuras de un niño que se siente muy solo y se encuentra el huevo de lo que será el famoso monstruo. Está bastante bien realizada y resulta entretenida, aunque no evita algunos momentos muy tópicos y habría sido más ágil con algunos minutos menos. Como suele ocurrir en estos casos, la trama es predecible pero el desarrollo es hábil para no caer en excesiva sensiblería y el director se centra más en la aventura. Tiene un reparto acertado encabezado por el niño Alex Etel que hace un trabajo creíble, y al que le acompañan actores buenos como Brian Cox, Emily Watson y Ben Chaplin. Russell también saca buen provecho de las magníficas localizaciones y deja algunas escenas realmente bonitas.
Bonita cinta familiar.
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