Película de 2006 dirigida por Geoffrey Sax. Alex Ryder es un joven de
15 años que vive con su tío y descubre a su muerte que era un espía
británico. La agencia le ficha tras ver sus dotes, pues su tío le ha entrenado
desde que era pequeño, ya que sospechan que un conocido millonario planea
realizar un atentado a gran escala. Utilizan al muchacho para infiltrarlo en la
organización del supuesto criminal, que además es el asesino de su tío, para
destaparlo.
Producción británica que pretende crear un agente 007 para
el público infantil y juvenil. Sigue el patrón de las clásicas películas del
agente británico más famoso con curiosos inventos para defenderse de los
malos, persecuciones en diversos vehículos, un criminal antológico que prepara
un gran plan y algunas escenas de pelea, acompañado todo de un poco sentido del
humor. El inconveniente es que no consigue engarzar debidamente todas esos
aspectos y tampoco encuentra el ritmo debido, de forma que el resultado se
vea irregular y con total falta de credibilidad. Para los más pequeños es suficiente
la acción y la exageración de ambos bandos, buenos y malos, para pasar un rato
entretenido. Los actores hacen un trabajo regular y hasta malo a pesar de
contar con caras reconocibles como Bill Nighy, Mickey Rourke, el cameo de Ewan McGregor ,
Alicia Silverstone, etc.
Fallida cinta familiar, entretenida para los peques pero
malamente digerible para el resto.
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