Película de 2019 dirigida por Sam Mendes. En plena I Guerra Mundial dos soldados aliados que están en las trincheras reciben la orden de llevar a cabo una misión que parece suicida pero que si fallan morirán casi 2.000 soldados (incluyendo el hermano mayor de uno de ellos). Por ello emprenden la arriesgada aventura teniendo que atravesar el campo de batalla y otros muchos peligros más.
Estupenda cinta sobre la que se llamó Gran Guerra, sencilla y austera pero muy eficaz. Mendes es también autor del guión y es capaz de aunar una puesta en escena fascinante con una visión intimista de la Guerra. Tiene un gran magnetismo por el realismo tanto de las imágenes como de la historia, y toda la humanidad que transmite, así como por la calidad técnica que atesora. Hace creer al espectador que está en medio del campo de batalla pero más por la tensión del momento que por la espectacularidad de la acción. Los dos protagonistas están a muy buen nivel, George MacKay y Dean-Charles Chapman, y con secundarios como Mark Strong y Benedict Cumberbatch. La fotografía, el montaje, los efectos visuales y sonido, dirección artística, vestuario... son fantásticos, permitiendo que la película alcance un nivel muy alto. No obstante, la dirección destaca por encima de todo y se ve que Mendes ha puesto todo su talento y alma en ella.
Muy buena
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