Película de 2014 dirigida por Steven Quale. Un equipo de cazatormentas está un poco desolado porque la temporada de tornados está terminando y no han conseguido grabar ninguno interesante. En las proximidades se está formando una tormenta considerable y esperan ser testigos de alguno importante, pero no es nada fácil. Por otro lado, los ciudadanos de la zona no imaginan lo que se les viene encima.
Otra cinta de catástrofes que pretende aprovechar la tecnología actual para deslumbrar al espectador, en esta ocasión con unos tornados devastadores. Quale demuestra su habilidad para rodar escenas de acción espectaculares y su incapacidad para crear historias interesantes y con las que el espectador pueda empatizar. Por ello deja una sensación algo extraña porque combina un buen y entretenido espectáculo con unas insulsas historias que pretenden dramatizar o servir de contexto o excusa para lo primero. Dichas historias sufren además de unas malas interpretaciones que sólo incrementan la poca credibilidad e interés que despiertan. Sin embargo, las escenas de las tormentas (que son por lo que el espectador está delante de la pantalla) sí están bien realizadas y cumplen las expectativas. Por todo ello, el resultado es un producto palomitero algo fallido porque el hilo conductor de la acción es excesivamente débil. Aún así, los aficionados al género de desastres naturales la disfrutarán.
Cine palomitero con escenas espectaculares pero bastante floja en general.
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