Película de 2012 dirigida por Jake Schreier. Un anciano vive solo y su hijo decide comprarle un robot para que le sirva como un especie de mayordomo. El hombre se resiste pero pronto empezará a encontrarle muchas ventajas e incluso piensa en utilizar al robot para volver a su antigua ocupación: ladrón de guante blanco.
Curiosa cinta que mezcla comedia, ciencia ficción, aventuras
(robos) y el drama de la vejez con un bonito símil de la inmortal obra Don Quijote. La idea de abordar
alguna de las dificultades que trae la vejez desde una perspectiva menos dura
funciona bien porque la hace mucho más amena y fácil de digerir. El guión es
bueno aunque se permite ciertas licencias con la parte de los robos, pero
funciona bien en lo más importante. Un pilar fundamental es el trabajo de su
protagonista, un estupendo Frank
Langella que demuestra su solidez con este estupendo papel en el que crea
ese cascarrabias pero bonachón abuelo. Está acompañado por caras conocidas como James Mardsen y Liv Tyler y una gran actriz, Susan Sarandon. Es simpática a
la vez que deja algunas reflexiones sobre la enfermedad, la vejez y la familia.
Por otro lado, le quita profundidad a todos los aspectos que aborda, pero
Schreier consigue un resultado muy equilibrado.
Bonita.
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