Película de 2015 dirigida por Neill Blomkamp. Una empresa de robots triunfa tras vender unos robot-policía en Sudáfrica y conseguir que los niveles de delicuencia se desplomen. Pero una banda planea atrapar a su creador para obligarle a que los detenga justo cuando éste experimenta con una prueba piloto de inteligencia artificial.
Blomkamp coescribe y dirige una historia sobre inteligencia artificial en un entorno violento, pero decide no dedicar mucho a las reflexiones y toma una perspectiva de entretenimiento para adolescentes. Aunque hay alguna idea buena no se llega a explotar y se centra en la acción y en la recreación de unos personajes que son demasiado superficiales. Destacan negativamente los malos, pues son meras caricaturas de lo que se puede esperar, tanto de los malos-malotes hasta del malo-traidor. Recuerda bastante a Robocop aunque con buenos efectos especiales pero de la misma "profundidad". Y todo ello a pesar de contar con un reparto con actores conocidos como Hugh Jackman y Dev Pattel, y otros de la altura de Sigourney Weaver.
Cine palomitero para adolescentes.
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