Película de 2017 dirigida por Andy Serkis. A finales de los años 50, una joven pareja vive enamorada su reciente matrimonio con gran felicidad hasta que la polio se cruza en sus vidas y le deja a él completamente paralizado. Eso significa que debe vivir en el hospital enchufado a una máquina, lo que quita todas las ganas de vivir.
El conocido actor Serkis elige para debutar tras las cámaras la historia real de Robin Cavendish y su familia. En ella, el amor está por encima de todo pero la tragedia, la desesperación y la esperanza también tienen mucha importancia. El propio hijo de los Cavendish es el productor de la cinta y el garante de la fidelidad de lo que cuenta. Serkis consigue una película muy emotiva en la que la historia es la clave pero que también cuida todos los aspectos artísticos. Y el enfoque para contarla es muy importante para escapar del drama sensiblero y alcanzar un debido equilibrio entre todas las emociones que contiene, pero en el que el amor y la determinación por mantenerlo inunda todo. Cuenta con un buen reparto en el que destaca la pareja protagonista, los jóvenes pero ya famosos Andrew Garfield y Claire Foy, con estupendas interpretaciones. Resalta valores muy inspiradores además de contar la historia de unas personas que cambiaron el mundo de la discapacidad severa tal y como se conocía.
Buena, bonita e inspiradora.
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