Película de 2008 dirigida por Gil Kenan. El planeta se ha vuelto inhabitable, así que los humanos han construido una ciudad bajo tierra. Durante generaciones han vivido ahí, con la única luz de las lámparas eléctricas alimentadas por un gran generador. Aunque hay una aparente felicidad, la verdad es que los alimentos escasean, la electricidad falla a menudo y no está autorizado inspeccionar más allá de los límites de la ciudad. Dos jóvenes intentarán buscar una salida y para ello tendrán que enfrentarse a numerosas pruebas y peligros.
Adaptación de la primera novela de la saga homónima creada por Jeanne DuPrau de aventuras adolescentes. Kenan cuida mucho toda la ambientación y todo el apartado técnico en este sentido destaca de forma considerable y refuerza a la cinta como un entretenido cuento para toda la familia (sólo los más pequeñines se pueden asustar de algún monstruo que sale). El reparto es de primer nivel combinando reputados actores como Bill Murray, Tim Robbins y Martin Landau con jóvenes promesas como Saoirse Ronan y Mackenzie Crook que hacen bastante bien su trabajo. Tiene un halo de misterio y buen ritmo lo que hace que los espectadores la disfruten a pesar de que la trama sea algo inocentona en su fondo.
Bien hecha y recomendable cinta familiar de aventuras.
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