Película de 2005 dirigida por Mike Newell. Harry asiste con sus amigos a la copa mundial de Quidditch cuando reciben un brutal ataque de los seguidores de Voldemort. Ya de vuelta en Hogwarts se encuentra con la sorpresa que se va a celebrar un prestigioso torneo entre las tres mejores escuelas de magia del mundo, participando un joven de cada una. Cuando el sistema de elección añade un cuarto candidato, Harry Potter, impacta a todos de forma espectacular porque la competición puede ser mortal y no tiene ni edad ni preparación suficiente. Harry y su padrino, Sirius, sospechan que alguien ha introducido su nombre para acabar con él.
Se trata de la cuarta entrega de la saga del niño mago creada por J.K. Rowling en la que se va entrando en la adolescencia de los protagonistas. Posiblemente es la más espectacular de todas, tanto por el mundial como por el torneo, con una excelente puesta en escena que le da toda la magia y encanto de esta saga literaria. Ademas Newell envuelve la trama con un suspense psicológico que eleva la tensión habitual de las aventuras de Harry, imprimiendo un estupendo ritmo desde el inicio hasta el final. El entretenimiento está asegurado y ni a los más pequeños (tampoco está recomendado a los menores de 7-8 años) se le harán largas las más de 2 horas que dura. Cuenta con el reparto habitual a los que se suman Ralph Fiennes, Miranda Richardson y Robert Pattinson.
Muy bien hecha, espectacular y trepidante.
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