Película de 2016 dirigida por David Lowery. Un niño se cría durante varios años en un bosque sólo con la compañía de un enorme dragón al que llama Elliot. Se encuentra con una guardabosques y, posteriormente, con unos leñadores que están talando árboles, siendo la hija de uno de ellos quien ve al pequeño. Se lo llevan para buscar a sus padres y no tardarán en descubrir al dragón, convirtiéndose en un preciado objetivo de caza. Pero el niño no dejará a su amigo de lado.
Dentro de la actual política de Disney de volver a rodar sus clásicos animados con personajes reales apoyados por la tecnología, el estudio incluye la famosa historia de Pedro y el dragón Elliot. Es una trama similar a la anterior aunque el desarrollo es menos cómico y más emotivo, incluso melancólico. Aunque resulta algo predecible, es su sensibilidad la que hace destacar el resultado, pues ni tiene mucho humor ni muchas aventuras, aunque sí las suficientes para gustar al público infantil. Los adultos pueden quedar algo decepcionados según sus expectativas ya que se trata de una versión poco pretenciosa sino muy sencilla, centrándose en el pequeño y los lazos sentimentales con el dragón. Lowery consigue acercarse mucho a ese "toque", el encanto que tenían los clásicos no animados de esta productora. Cuenta con la participación del galáctico Robert Redford y actores conocidos como Bryce Dallass Howard, Karl Urban y Wes Bentley, que junto con el protagonista Oakes Fegley hacen que el reparto funcione adecuadamente.
Entretenida y bien realizada
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