Película de 2005 dirigida por Scott McGehee y David Siegel. Una familia parece vivir un momento muy feliz por sus cuatro miembros cuando dos de ellos empiezan a sufrir importantes crisis: el hijo mayor se plantea su religión y siente que le falta algo clave en su vida cuando su padre centra su atención en su hermana, y la madre tiene extraños recuerdos que le dejan desconcertada. Por otro lado, el padre cree que la niña tiene un don extraordinario que le acerca mucho a Dios.
Adaptación de la primera novela publicada de Myla Goldberg sobre la fractura de una familia coincidiendo con los triunfos de la hija pequeña en los concursos de deletreo de palabras (spelling bee, de ahí el título original). Es un drama familiar con crisis de identidad donde la religión tiene un papel relevante e intenta hacer reflexionar a los padres sobre la educación (atención, control, ayuda, motivación, etc.) de los hijos. Aunque la trama está bien el desarrollo es insuficiente para darle credibilidad a lo que cuenta y, además, los directores no consiguen darle la intensidad debida. No llega a transmitir todos los sentimientos que debería, por lo que falla considerablemente. Las actuaciones de los niños y de Juliette Binoche están bien, no como la de Richard Gere que parece repetir los mismos gestos que los ya vistos anteriormente y para diferentes generos de películas, por lo que no encaja. Fuera de los EE.UU. el contexto de los famosos concursos de deletreo se ve un poco absurdo.
Fallido drama familiar.
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