Película de 1988 dirigida por Haya Miyazaki. Un padre se muda con sus hijas a una nueva casa en el campo mientras la madre se recupera en el hospital. Las pequeñas descubren unos seres enigmáticos en la casa y a otros más extraños aún en el jardín. Parecen inofensivos y hasta simpáticos, llamando Totoro al más grande, una especie de espíritu del bosque. Juntos vivirán algunas aventuras especiales.
El maestro del cine de animación japonés escribe y dirige un bonito cuento sobre dos niñas que disparan su imaginación cuando se mudan al campo. Capta de una forma genial el comportamiento de las pequeñas, especialmente el de la menor, que seguro que a los padres les arranca más de una sonrisa por sus reacciones perfectamente naturales. Tiene un trasfondo muy tierno y realza valores como la naturaleza, la imaginación, la familia, la amistad, etc. Miyazaki vuelve a deslumbrar con su enorme fantasía y consigue satisfacer tanto a adultos como a menores, pero serán los niños quienes más se diviertan con ella.
Muy buena cinta familiar.
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