Película de 2008 dirigida por Oxide Pang Chun y Danny Pang. Un mercenario asesino va a Bangkok a eliminar cuatro objetivos. Aunque siempre es estrictamente fiel a sus reglas de no dejar rastro ni establecer relaciones con terceros, en esta ocasión las rompe.
Penosa cinta que se mueve entre la acción de un asesino a sueldo realizando varios encargos, la llamada del amor que siente y hasta una pretensión de fábula con filosofía/moraleja. No tiene el más mínimo sentido del ritmo, pues a veces parece que empieza a coger forma y luego se congela. Lo peor es el planteamiento, pues carece de una presentación adecuada y se limita a mostrar cosas que a veces encajan y otras son inconexas. Incluso Nicolas Cage se deja arrastrar por el despropósito general y se limita a poner caras de pena y de duro, según toque.
Muy mala.
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