El secreto de vivir

Comedia romántica en formato de cuento moral de Frank Capra de 1936. Un honrado ciudadano de un pequeño pueblo recibe la noticia de haber heredado una inmesa fortuna de un familiar para lo que debe ir a Nueva York. Allí la prensa lo busca para saber quién es el afortunado, y al descubrir que es un inocentón tratarán de ridiculizarlo lo máximo posible.

Capra vuelve a rodar otra bonita historia donde un buen hombre se enfrenta con la codicia, envidia e hipocresía de la sociedad. Tiene un buen guión de Robert Riskin y la incomparable maestría de Capra para rodar estas fábulas morales bienintencionadas. El héroe está excelentemente interpretado por Gary Cooper, teniendo como compañera a una estupenda Jean Arthur. La crítica que lanza no ha envejecido nada a pesar de contar con más de 70 años, pues es incluso más aplicable hoy día (lo cual es triste de ver).

Entretenida y con momentos graciosos, pero sobre todo es una bonita historia.

Matrimonio original

Única comedia americana de Alfred Hitchcock realizada en 1941, considerando que Pero...quién mató a Harry es una película de intriga aunque también abarca la comedia negra. Trata de las relaciones de amor-odio de un matrimonio que descubre que por una consfusión administrativa su matrimonio no es legal y deben volver a casarse, si es que están interesados en normalizar su situación conyugal.

Hitchcock se aleja de su terreno habitual y se adentra dentro de la comedia romántica. La primera mitad de la película es bastante buena, muy ágil y con momentos bastantes cómicos. El guión de Norman Krasna contiene diálogos ingeniosos y situaciones graciosas en esta primera mitad. Sin embargo, se va estancando y acaba perdiendo el ritmo, haciéndose un poco lenta y hasta algo pesada. Los actores están muy bien en esa primera mitad pero acaban sufriendo las situaciones un poco repetitivas de la segunda mitad, por lo que les vemos una y otra vez con el mismo registro. Entre éstos, Carole Lombard destaca sobre todos con su innatas condiciones para este género.

Entretenida, pero va de más a menos.

Horizontes de grandeza

Uno de los mejores western de toda la historia, dirigido por el maestro William Wyler en 1958. El prometido de la hija de uno de los mayores terratenientes de la zona llega del Este y se encuentra con una sociedad completamente diferente a la que conoce. Trata de mantener sus buenas formas cívicas pese a la hostilidad de los hombres del lugar, para vergüenza de su propia amada.

Wyler vuelve a dejar otra muestra de su buen hacer en este arte. Rebosa calidad en cualquier aspecto, constituyendo un western épico. Retrata el contraste entre el Este y el Oeste de los EE.UU. de aquella época, utilizando una historia de amor y unos personajes opuestos en todos los sentidos. Tiene un espléndido ritmo narrativo, pero sin caer en ninguna prisa y deleitándonos con escenas soberbias, dándole su tiempo adecuado (a veces incluso sin diálogo). La música de Jerome Moross es la BSO del oeste por antonomasia (con permiso del señor Morricone), y los inolvidables paisajes están fotografiados excelentemente por Franz Planer. Las interpretaciones son extraordinarias, contando con estrellas como Charlton Heston, Gregory Peck, Jean Simmons, Burl Ives, Carrol Baker, Chuck Connors y Charles Bickford.

Absolutamente imprescindible.

Siete días de mayo

Estupendo thriller político de 1964 dirigido por John Frankenheimer. Trata sobre la conspiración que la alta cúpula militar de los EE.UU. prepara para derrocar al actual presidente debido a su débil y pacifista postura frente a la URSS.

El magnífico guión de Rod Serling está basado en la novela homónima de Fletcher Knebel y Charles Waldo Bailey II publicada en 1962. Es increíble la similitud que tiene este argumento con lo que realmente ocurrió tan sólo un año después con el asesinato del presidente Kennedy. Precisamente JFK apoyó la realización de la película (durante 1963) por medio del secretario de prensa de la Casa Blanca, todo lo contrario que el Pentágono que no quería que se rodase. Parece obvia esta oposición porque a tiempo real se estaba preparando algo similar. Se dice que una de las inspiraciones de la novela fue la situación que se generó entre Kennedy y el jefe de las fuerzas aéreas LeMay tras el desastre de Bahía de Cochinos.

Volviendo al guión, crea una gran atmósfera de suspense y tensión con diálogos inteligentes y personajes bien desarrollados que, aunque son bastantes y diversos, no dificultan el seguimiento de la trama. Frankenheimer hace un rodaje sobrio, en blanco y negro, queriendo darle más realismo a la historia. Tiene algunos planos y tomas realmente extraordinarias, con una espéndida profundidad de campo. A ello contribuye la magnífica fotografía de Ellsworth Frederick y la dirección artística de Odell y Boyle. Hay que destacar el reparto de lujo con que cuenta, todos ellos fantásticos: Burt Lancaster, Kirk Douglas, Fredric March, Edmond O´Brien, Ava Gardner, Martin Balsam...

Imprescindible para los amantes de las tramas políticas y muy recomendable para los demás.

El último refugio

Magnífica muestra de cine negro del genial Raoul Walsh de 1941. Tras salir de la cárcel, Roy Earle se prepara para dar un último golpe para poder retirarse, pagando también el favor a la persona que le ha sacado de prisión. Mientras tanto, entabla amistad con una familia humilde de granjeros, sintiéndose atraído por la nieta.

Toda la película rebosa gran calidad gracias a la mano del maestro Walsh. El estupendo guión es de John Huston y W.R. Burnett, desarrollando una entretenida historia de un gángster con un lado bueno. Los personajes son estupendos, siendo además interpretados excelentemente por Humphrey Bogart (especialmente brillante), Ida Lupino y Henry Travers, entre otros. También destacar la espléndida fotografía de Tony Gaudio, con algunos maravillosos juegos de sombras.

Muy entretenida y de gran calidad. Es la película que consagró a Bogart como estrella.

Recuerdo de una noche

Comedia romántica de 1940 del gran, aunque no muy conocido, Mitchell Leisen. En un juicio por robo a una bella chica a las puertas de Navidad, el fiscal devuelve una jugada al abogado defensor y consigue retrasar la vista hasta después de las fiestas. Pero después siente remordimientos de hacer pasar a la señorita la Navidad en la cárcel por lo que paga la fianza. Con lo que no contaba era que ella pretendería irse con él a pasar tan entrañables fechas...

Leisen vuelve a realizar una sólida película basada en un gran guión de Preston Sturges. Básicamente es un bonito cuento de Navidad, con algunos buenos momentos cómicos, desarrollando la historia de amor que va surgiendo entre el fiscal y la ladrona. Es una cinta modesta y sencilla, con una buena fotografía de Ted Tezlaff, y muy bien dirigida, todo fluye con gran naturalidad. Fred MacMurray y Barbara Stanwyck están geniales (pareja que se inmortalizaría gracias a (Perdición), con unas interpretaciones muy creíbles.

Bonita historia de Navidad que merece la pena ver.

No es país para viejos

Interesante y tenso thriller de los hermanos Coen de 2007. La historia ocurre en 1980 en Texas, cerca de la frontera, donde un hombre encuentra un maletín de dinero en el escenario de un intercambio de droga que ha acabado con todos los traficantes muertos. Se lo lleva a casa lo que hace que un despiadado asesino lo persiga para recuperar el dinero. Pero todo se acaba complicando.

Se trata de una de las mejores películas de los Coen, aunque sin llegar al nivel de Fargo o El gran Lebowski. Es una película vibrante, donde incluso las escenas tranquilas (sin asesinatos o sangre) transpiran tensión. El estupendo guión de los Coen está basado en la novela homónima de Cormac McCarthy y está dirigida excelentemente, con gran precisión. Las escenas del desierto son magníficas, con unos silencios que tranmiten más de lo que podía haber cualquier diálogo o banda sonora. Enseguida engancha al espectador y no lo suelta hasta el cierre final. Pierde algo de fuerza con el papel del sheriff que parece algo disperso, especialmente en algunos diálogos que no conducen a nada. Las actuaciones son sobresalientes, con Tommy Lee Jones, Josh Brolin, Woody Harrelson, Kelly Macdonald y, sobre todo, un espeluznante Javier Bardem. Con un horroroso corte de pelo, Bardem se muestra frío, cínico y sin ningún tipo de sentimientos, transmitiéndolo con una mirada escalofriante. Lo único que no está a la altura es el final, pues queda una laguna y una sensación de inacabado que deja mal sabor de boca.

Buena película con un excepcional comienzo y un mal final.

Up in the air

Película dramática aunque con momentos cómicos de 2009 dirigida por Jason Reitman. Trata de la forma de vida de un ejecutivo cuya misión es desplazarse de un punto a otro del mapa para realizar despidos. De pronto, su empresa quiere empezar una nueva metodología para ahorrar costes, a la vez que se cuestiona su filosofía de vida cuando empieza a tener relaciones con una mujer que lleva su mismo tipo de vida.

La actividad de la empresa y del cometido del protagonista es sumamente duro, especialmente en estos tiempos de crisis y gran desempleo. Además, el asunto de fondo sobre las relaciones personales también es bastante serio. Por ello, se agradece la perspectiva y tono que usa Reitman para no hacer de este drama algo difícil de digerir, pero mandando todo su mensaje. Tiene un buen guión del propio Reitman y Sheldon Turner basado en la novela de Walter Kirn, y no cae en los convencionalismos románticos. Los actores están bastante bien, destacando George Clooney en un papel que le va como anillo al dedo. También señalar la buena banda sonora, fotografía y localizaciones.

Entretenida, con momentos graciosos, pero dura por el tema que trata. Hecha con habilidad y calidad.

Enemigos públicos

Michael Mann dirige la historia de John Dillinger en 2009. Este ladrón de bancos se convirtió en el enemigo público de los EE.UU., fue perseguido implacablemente por el agente del FBI Melvin Purvis y fue el motivo por el que se creó el FBI y definieron los delitos federales (impulsados por Hoover, responsable último de la caza de Dillinger).

Mann firma también un buen guión con Ronan Bennet y Ann Biderman basado en el libro de Brian Burrough "Public Enemies: America´s greatest crime wave and the birth of the FBI, 1933-43". Es una historia interesante, bien contada y con buenos actores (estupendos Billy Crudup como Hoover y Christian Bale como Purvis, pero con un simplemente correcto Johnny Deep). Tiene buenas escenas de acción, para la que usaron millones y millones de balas, y una muy cuidada ambientación (espectaculares coches, escenarios y decorados). En su contra sólo encuentro el excesivo movimiento de cámara en escenas que no necesitan transmitir intensidad ni tensión, así como el descenso del ritmo narrativo en algún pasaje.

Entretenida, bien hecha y da a conocer unos acontecimientos no muy conocidos de la historia reciente de los EE.UU.

Rashomon

Es la película con la que se dio a conocer internacionalmente el maestro Akira Kurosawa en 1950. Cuenta la historia de un asesinato en pleno bosque relatada por los tres participantes (incluída la víctima gracias a una médium) y el único testigo accidental de los hechos.

Bajo la búsqueda de la verdad en el caso de homicidio se halla otra búsqueda más profunda, y es la de la naturaleza real del ser humano: bondadosa o cruel, egoísta o generosa. Kurosawa dirige con mimo esta cinta, cuidando todos lo detalles y utilizando una estructura narrativa que le da fuerza a la trama: uso de los flashbacks por los que los participantes y el testigo nos cuentan los hechos. Tiene buenas interpretaciones (con dos de sus actores habituales Toshiro Mifune y Takashi Shimura), personajes de contraste, y estupendas fotografía y música; todo de una gran calidad. El único inconveniente es que le falta a veces algo de fluidez, pues algunas escenas las alarga innecesariamente, rompiendo el ritmo narrativo.

Buena película, con interesante trama contada de manera original, aunque a veces se hace algo lenta.

JFK

Se trata de la versión extendida (unos 17 minutos extra) y montada por el director, Oliver Stone, de la película que dirigió en 1991. Es la recreación pormenorizada del asesinato del presidente Kennedy a raíz de las investigaciones que lleva a cabo el fiscal de Nueva Orleans Jim Morrison.

Extraordinario ejemplo de cine histórico reciente, con un ritmo trepidante y la inclusión de numerosas tomas reales. Se explica, se detalla, hasta se enumeran pruebas de lo que realmente ocurrió, de una manera clara para el espectador (usa vídeos, maquetas, recreaciones, montajes, etc.) y sin perder el desarrollo hábil de la trama. El gran guión del propio Stone y Zachary Sklar está basado en los libros de Jim Garrison "On the trail of the assassins" y de Jim Marrs "Crossfire: The plot that killed Kennedy". Aunque hay muchos aspectos destacables, pues todo rebosa gran calidad, lo más impresionante es el montaje de Joe Hutshing y Pietro Scalia, intercalando inteligentemente las escenas rodadas con los documentos conseguidos de la época. Tiene también un reparto excelente: Jack Lemmon, Walter Matthau, Donald Sutherland, Joe Pescy, Kevin Bacon, Tommy Lee Jones, Gary Oldman, Sissy Spacek, Kevin Costner, etc. Oliver Stone consigue la obra cumbre de su carrera cinematográfica con una dirección y producción muy trabajadas y cuidadas. Su trabajo de investigación fue tal que consiguió mostrar por primera vez al público el vídeo casero del asesinato. Se preocupa de desgranar la complejidad de lo ocurrido y consigue mostrarlo hábilmente para que no nos perdamos en el enredo oficialmente tramado.

Fascinante película de gran rigor histórico y endiabladamente entretenida.

Sherlock Holmes desafía a la muerte

Nueva entrega de la saga del famoso detective de la mano nuevamente de Roy William Neill en 1943. Durante la II Guerra Mundial el doctor Watson dirige un centro que cuida a militares con estrés postraumático en una mansión cedida parcialmente por sus propietarios. Se empiezan a producir unos extraños asesinatos y ataques, por lo que decide pedir ayuda a su amigo Holmes.

Neill vuelve a rodar otra aventura de Sherlock Holmes y lo hace con muy buen oficio. Aunque al principio parece querer adentrarse algo en el género de terror, acaba centrándose en el policíaco con las investigaciones del detective y del inspector jefe Lestrade. La trama es interesante, con bastantes personajes en la mansión lo que hace más difícil el caso, y la va desarrollando apropiadamente. Vuelve a introducir elementos que le añaden un halo algo fantasmal, acentuados con un extraño ritual dirigido por un enigmático sermón y un reloj que con sus campanadas presagia los asesinatos. Buena fotografía y con los siempre estupendos Basil Rathbone y Nigel Bruce.

Muy entretenida, recomendable incluso para los no aficionados a este personaje.

El mundo en sus manos

Una de las mejores película de aventuras marinas de la historia realizada en 1952 por Raoul Walsh. Narra el intento de una condesa rusa de huir de un matrimonio arreglado por el zar para lo que quiere contratar un barco que le lleve a Alaska. Acaba enamorándose del conocido capitán Clark, "el hombre de Boston", pero no será nada fácil escapar del obstinado príncipe ruso.

Walsh consiguió una auténtica joya del género de aventuras, dejándonos unos personajes absolutamente inolvidables como el mencionado hombre de Boston, el portugués, el esquimal, etc. Las escenas de las goletas en el mar son espectaculares, de las mejores que podemos ver. El argumento es interesante y es desarrollado con mucho ingenio, usando unos personajes que se mantendrán en nuestro recuerdo para siempre (no recordaba nada de esta película, pero enseguida identifiqué a los protagonistas porque permanecían aún en mi memoria tras muchos años). Aunque se toca un tema algo peliagudo como es el de la caza de focas, se hace con tacto y no se ve ninguna escena desagradable. El guión es de Borden Chase basado en la novela homónima de Rex Beach. Tiene una buena fotografía de Russel Metty, a pesar de la dificultad de algunas tomas. Los actores son excelentes, destacando a un escandaloso Anthony Quinn y al siempre elegante y caballeroso Gregory Peck.

Imprescindible para los amantes de las aventuras.

El hombre elefante

Desgarradora historia real rodada por David Lynch en 1980 sobre un hombre que tenía terriblemente deformado su cuerpo, en especial su cabeza. Un médico lo descubre en una feria viendo cómo es exhibido y humillado públicamente y tratará de darle cierta dignidad a su vida.

David Lynch hace un trabajo extraordinario en la realización, con una producción sumamente cuidada. También firma el guión junto con Eric Bergren y Christopher de Vore, basándose en la historia real de John Merrick, que vivió en Londres a finales del siglo XIX. Para contar la historia elige muy acertadamente el blanco y negro, dándole más realismo y restando algo del dramatismo visual inherente al personaje. Cuenta con un espléndido reparto: Anthony Hopkins, John Hurt, John Guielgud, Wendy Hiller, Anne Bancroft,... La fotografía de Freddie Francis, la dirección artística, el vestuario, el maquillaje, la música, etc, todo es de una magnífica calidad. Lo peor es el tema de la película, pues es duro ver los sufrimientos por los que debió pasar este hombre. Lynch retrata a la perfección las miserias humanas, pero también el amor y buena voluntad que alberga en algunas personas.

Muy bien hecha en todos los aspectos, se ve con gran interés pero es una historia real bastante dura.

Traidor

Película policíaca de 2008 dirigida Jeffrey Nachmanoff con guión de él mismo junto con Steve Martin. Narra las investigaciones de un tenaz agente del FBI para evitar actos terroristas islámicos, para lo que persigue a un hombre experto en explosivos y que es un antiguo miembro de las fuerzas especiales de los EE.UU. Va descubriendo pistas que sugieren que el grupo prepara un gran atentado pero también le surgen dudas sobre dicha persona, si se trata de un infiltrado de la CIA o es un traidor del ejército americano.

Nachmanoff escribe y dirige un sólido thriller, en el que los malos son malos, pero los buenos no lo son tanto y presenta dilemas morales al respecto. Desde el inicio crea inteligentemente la trama, desvelando poco a poco la realidad del protagonista y presentando sus inquietudes, pero manteniendo el suspense para el espectador hasta el momento final. No es predecible en general, aunque sí algunos hechos, incluso con alguna buena sorpresa. Cuenta con buenas interpretaciones, especialmente de Guy Pearce y Don Cheaddle, y algún buen secundario.

Muy entretenida, buen suspense y equilibrada perspectiva en un asunto tan complicado como el del terrorismo extremista.

La octava mujer de barba azul

Comedia romántica de 1938 dirigida por el maestro Ernst Lubitsch y con guión de los geniales Billy Wilder y Charles Brackett. Un millonario americano se enamora de una chica de la aristocracia francesa, aunque arruinada, y pretende casarse con ella. Ésta accede en un principio pero descubre que sería la octava esposa para él, por lo que decide hacerlo sólo por el dinero y se lo deja bien claro.

Buena obra de este director pero no llega a la altura de las obras maestras realizadas por este maestro del séptimo arte. Igual ocurre con el guión, que aunque tiene algunos buenos momentos, no tiene el ingenio y la chispa característica de sus autores. No tiene flecos sueltos ni carece de realismo, sólo que no llega al nivel que alcanzaron con otros guiones. No le falta la ironía y la sátira, especialmente en el comienzo, dejando muy buenas escenas (como la de la tienda). Los protagonistas y secundarios están muy bien, Gary Cooper, Claudette Colbert, David Niven, Edward Everett Horton,... mostrando su elegancia y el estupendo perfil que tienen para la comedia.

Entretenida, con buenos momentos pero no es la obra maestra que muchos dicen que es.

Qué les pasa a los hombres

Comedia romántica de 2009 dirigida por Ken Kwapis con guión de Marc Silverstein y Abby Kohn basado en el libro de Greg Behrendt y Liz Tuccillo. Narra varias historias cruzadas de cinco mujeres alrededor de la treintena buscando o queriendo consolidar una relación sentimental.

Es un fallido intento de conseguir el éxito de películas como Love actually siguiendo una fórmula similar, explotando al máximo los tópicos de las relaciones sentimentales, especialmente en lo que a los hombres respecta. Tienen gracia algunos comentarios o la exageración de dichos tópicos, y en general se deja ver. Pero nada más. Ninguna de las historias, más dramática o cómica, llega a calar en el espectador, pues el guión y la dirección sufren de una gran superficialidad. Y eso a pesar del deslumbrante plantel de estrellas con que cuenta: Jennifer Aniston, Drew Barrymore, Scarlett Johansson, Jennifer Connelly, Ben Affleck, Kris Kristofferson, Bradley Cooper, etc.

Superficial entretenimiento, con algún momento gracioso pero aburrido en otras ocasiones.

Robin Hood

Revisión de la leyenda del arquero más famoso del cine de la mano de Ridley Scott en 2010. Básicamente es una precuela de la historia que conocemos, por lo que desde el principio veremos sucesos que no nos cuadrarán con lo que conocemos del personaje. Incluso se dejan de lado, afortunadamente, las clásicas mallas verdes y los gorros con pluma.

Ridley Scott realiza un trabajo técnico muy bueno, intentando darle a esta leyenda algo de rigor histórico y humanizar algo el personaje. La ambientación está muy cuidada, con estupendos paisajes, castillos y ciudades perfectamente recreadas, vestuario y aparejos con todo lujo de detalles, etc. Las escenas de acción son estupendas, como este director ya ha demostrado en varias ocasiones. El guión es el punto más débil de la cinta, pues intenta darle más verosimilitud a la historia pero paralelamente muestra algunas cosas difíciles de creer, incluso hasta un poco ridículas. A su favor diré que tiene algún toque de humor pero no busca la gracieta fácil constante. En cuanto a su fidelidad a lo que ocurrió, pues no está claro quién fue y ni siquiera cuándo vivió, por lo que no deja de ser una teoría más, aunque fundada en ciertos indicios. Los actores cumplen su papel pero sin brillar en sus interpretaciones.

Muy entretenida, técnicamente muy buena y espectacular por momentos.

Un tipo genial

Sencilla y bonita comedia de 1983 escrita y dirigida por Bill Forsyth. Una petrolera multinacional quiere construir en una bahía escocesa una refinería por lo que debe comprar todas las propiedades del pueblo que allí se asienta. Para ello, un joven de adquisiciones se desplaza a la localidad para negociar la compra, además de llevar el encargo del presidente de la compañía de vigilar el cielo.

Se trata de una comedia costumbrista donde muestra el enorme contraste en la gran ciudad y un diminuto pueblecito costero. El guión explota ese choque y va mostrándonos el sentir de los habitantes hacia el extranjero que viene a hacerles ricos a todos. También hace una reflexión sobre el éxito en la vida y lo que realmente da la felicidad (coche deportivo, gran salario, trabajar para una multinacional, etc). La extraordinaria banda sonora de Mark Knopfler es ya un clásico, y cuenta también con una bella fotografía de la mano de Chris Menges. Los actores están todos muy bien, destacando la presencia de Burt Lancaster.

Entretenida, graciosa y bonita historia bien rodada.

El libro negro

Película bélica dirigida por Paul Verhoeven en 2006 sobre unos hechos reales ocurridos al final de la Segunda Guerra Mundial en Holanda. Una joven judía se une a la resistencia a finales de 1944 y entabla una relación con un oficial alemán para obtener información. La situación se le complica tanto que el final de la guerra parece que no le asegurará tampoco su salvación.

Verhoeven vuelve tras las cámaras tras la fallida y comercial El hombre sin sombra con una historia real en su Holanda natal. Firma también el guión junto con Gerard Soeteman y lleva a cabo un delicado trabajo de producción, consiguiendo un buen resultado final. La historia que nos cuenta es fascinante, y el suspense va aumentando gradualmente conforme avanza la cinta, aunque el estilo usado de flashback le quita parte de la intriga al saber que la heroína acaba felizmente con vida. Tiene un buen vestuario, dirección artística, fotografía e interpretaciones. Procura evitar las tragedias sufridas para no caer en un drama terrorífico tanto que a veces le resta credibilidad, e incluye algunas escenas de contenido sexual tan explícitas como innecesarias.

Interesante historia contada con una buena película.

Mesas separadas

Estupendo drama de 1958 dirigido por Delbert Mann con guión de John Gay y Terence Rattigan basado en la obra de teatro de este último. En un hotel de la costa inglesa conviven desde hace tiempo varios huéspedes pero que mantienen sus "correctas" distancias según marcan los cánones de la sociedad británica postbélica. La llegada de una nueva huésped junto con un artículo de un periódico local harán que se remuevan sus tranquilas vidas.

Mann hace una dirección muy teatral de esta magnífica obra, retratando diferentes personalidades que están sufriendo por determinadas causas. Lo hace mostrando tres historias de amor y otros solitarios personajes. El guión es muy sólido y nos dibuja unas personalidades fascinantes que se van enfrentando consigo mismos y con los demás. Ayuda mucho el extraordinario reparto, pues cada uno de los actores está soberbio: Burt Lancaster, David Niven, Deborah Kerr, Rita Hayworth, Wendy Hiller.... todos magníficos. Pero David Niven sobresale en el final, mostrando todo lo que está sientiendo: verguenza, timidez, emoción, felicidad. Realmente inconmensurable en el tramo final. Además, cuenta con una bella fotografía del gran Charles Lang.

Muy recomendable.

El increíble hombre menguante

Interesante muestra del cine de ciencia ficción dirigida por Jack Arnold en 1957. Tras la exposición a una niebla de origen nuclear, un hombre ve cómo su tamaño va menguando progresivamente. Busca ayuda en la comunidad médica e investigadora para detener su evolución pero nadie ha visto nunca enfermedad tan extraña.

Sorprendente cinta que va recogiendo cómo un hombre va perdiendo volumen de una manera creíble y real. El excelente guión de Richard Matheson va narrando en primera persona cómo va viviendo la situación, transmitiendo su esperanza, desesperación, incomprensión, etc. Tiene buen ritmo aunque hay un momento en que se estanca un poco y desespera al espectador, lo cual también es fruto de la atmósfera conseguida. La dirección artística es excelente, con los decorados y objetos de un tamaño adecuado para hacer real el tamaño del protagonista en cada momento. Increíblemente, no ha envejecido absolutamente nada. Desde luego que debió ser una fuente de inspiración para Peter Jackson para su El señor de los anillos.

Recomendable, es entretenida y de gran calidad.

Ultimátum a la Tierra

Película de ciencia ficción de 1951 dirigida por Robert Wise. Un ovni llega a la Tierra y, tras dar varias vueltas alrededor del globo, aterriza y se baja un extraterrestre bajo la atenta mirada de los hombres que miran con expectación sin saber si se trata de algo pacífico o violento. Lo reciben atemorizados y con las armas preparadas para responder cualquier intento extraño que pueda hacer.

Es un buen ejemplo de este tipo de cine que, sin los medios actuales, es capaz recrear seres y objetos de otros planetas con bastante calidad (con la excepción del robot). Tiene un buen argumento y es bien desarrollado por el guión que hace despertar enseguida el interés del espectador. Mantiene ese interés hasta el final, algo esperado y con buenas intenciones y mensaje.

Entretenida pero no apta para los no aficionados al género fantástico

Un sueño posible

Película de 2009 dirigida por John Lee Hancock con guión de él mismo basado en el libro homónimo de Michael Lewis que cuenta la historia real de Michael Ohern, un chico procedente de una familia rota por las drogas de la peor zona de Memphis. Tras conseguir entrar en un colegio privado, una familia que lleva sus hijos al mismo va aumentado la ayuda que le proporciona y va descubriendo el tipo de persona que es. El chico tiene un físico ideal para la práctica del fútbol americano pero debe superar sus notas para que le permitan jugar.

Impresionante y conmovedora historia la que nos ofrece esta película. Es increíble, tanto que durante su visionado pensaremos que es muy bonita pero imposible de creer, hasta que nos enteramos que es real y que ha ocurrido hace escasos años. Hancock hace un gran trabajo, ofreciendo una perspectiva real de lo que ocurrió pero sin cebarse en el drama vivido por este adolescente. Se centra en la buena voluntad de la familia Tohuy y la capacidad de superación y enorme bondad de Ohern. Introduce algunas escenas de humor que hacen que la película sea más entretenida aún. Los actores están muy bien, destacando Sandra Bullock , Quinton Aaron y el niño Jae Head, que es (casi) siempre fuente de gracias.

Muy bonita, entretenida y hace que queramos ser mejores personas.

No hay tiempo para amar

Otra bonita comedia romántica de Mitchell Leisen, dirigida en esta ocasión en 1943. Nos cuenta la historia de una reportera (una mujer muy moderna para su época) que es mandada a las obras de un túnel y tiene un tropiezo con uno de los obreros. Se encapricha con él y, pensando que no es suficiente para ella, decide tener más encuentros para darse cuenta que es completamente inapropiado y no tiene las virtudes que ella quiere en un hombre.

Leisen vuelve a este género con un guión de Claude Binyon y Warren Duff que no llega a la altura de otras de sus obras (especialmente Medianoche), pero que aún así está bien elaborado y nos cuenta una historia de amor con personas de muy diferentes clases sociales y posiciones. Eso da lugar a situaciones graciosas y a un entretenido argumento en general. Cuenta con una pareja protagonista de lujo, una fabulosa Claudette Colbert con un papel que le va como anillo al dedo, y un buen Fred MacMurray, aunque no llega al nivel de otras de sus interpretaciones. La fotografía de Charles Lang es estupenda y también destaca la dirección artística, brillando en los complicados planos en el túnel.

Entretenida, simpática y con algunas buenas escenas cómicas.