lunes, 31 de octubre de 2011

El escritor

Magnífico thriller de 2010 dirigido por Roman Polanski. El exprimer ministro Británico, envuelto en la polémica de haber metido al país en intervenciones militares con pruebas falsas, está preparando sus memorias con la ayuda de un escritor. Pero éste aparece ahogado en la costa, por lo que contrata a otro gracias a una suculenta oferta económica, pues era reacio al trabajo. Le dan muy poco tiempo y debe hacerlo en la casa donde reside el político, entre grandes medidas de seguridad y protestas ciudadanas. Tras su llegada al fortín conocen que un ministro suyo le acusa de torturas a prisioneros y entregas ilegales a la CIA, lo que hace que el Tribunal Internacional de la Haya le acuse de crímenes de guerra.
Polanski sorprende con esta cinta gracias a la intriga y tensión que consigue. Rueda de una manera muy sobria y austera, elimina de la pantalla todo lo superfluo y utiliza decorados minimalistas que resalten la soledad del protagonista, creciendo con ello la tensión en el espectador. El ritmo que imprime no es alto, deja que todo vaya fluyendo con precisión manejando sabiamente el tiempo. Es también coautor del estupendo guión con Robert Harris, adaptando la novela de éste. Demuestra que se puede hacer un thriller de una manera muy "artesanal", sin necesidad de grandes medios ni efectos especiales, sólo un buen guión, un puñado de buenos actores y mucho talento tras la cámara. La mayor parte de la interpretación recae sobre el protagonista, un eficaz Ewan McGregor, acompañado muy bien por actores como el espléndido Tom Wilkinson, Pierce Brosnan, Olivia Williams, Timothy Hutton, Eli Wallach, etc.
Interesante, entretenida y de calidad.

sábado, 29 de octubre de 2011

Tú y yo

Obra maestra de 1957 dirigida por Leo McCarey, realizando un remake (casi idéntica, hasta con el mismo guión) de la que hiciera él mismo en 1939. Un conocido casanova conoce en un crucero a una chica y comienzan una historia de amor. Ambos están prometidos por lo que intentan, especialmente ella, que nada ocurra entre ellos. Pero es inevitable y deciden darse 6 meses para confirmar que lo que sienten es verdadero y que no importa que sus situaciones económicas sean adversas.
Esta película está considerada por méritos propios como la más romántica de la historia. El guión del propio McCarey y Delmer Daves es muy bueno, pero los tres pilares son la dirección, las interpretaciones y la banda sonora. La dirección es de una increíble sensibilidad, elegancia e inteligencia. Es inolvidable la escena del primer beso en la escalera del barco, el mejor "primer beso" del celuloide. Contiene algunas de las escenas más emocionantes que hayamos podido ver en la gran pantalla y que posiblemente más lágrimas haya hecho derramar. La pareja protagonista está perfecta, Cary Grant y Deborah Kerr consiguieron que sus personajes se convirtieran en inmortales. Ambos están geniales separadamente y en conjunto, pues muestran una gran química entre ellos. Y, por último, la preciosa canción compuesta por Harry Warren que se repite varias veces, destacando cuando la interpretan en casa de la abuela de Nick, sube aún más la carga emocional que ya de por sí tiene la cinta. El propio McCarey le puso letra a la canción, An affair to remember, siendo una de las más bellas canciones compuestas jamás para una película.
Imprescindible.


Qué verde era mi valle

Obra maestra de 1941 dirigida por el maestro John Ford. Nos cuenta unos años en la vida de un pueblo minero con orgullosos y honestos trabajadores y sus familias, narrado en forma de memorias del que fue un niño por entonces. La situación de por sí es dura, pero se endurece aún más cuando la empresa reduce los salarios y los mineros deciden ir a la huelga.
Ford retrató con un bello homenaje a los pueblos mineros con este soberbio drama que muestra cómo vivían las familias en esos valles. Nos enseña las penurias y dureza que suponía esta vida, pero también los valores familiares, la dignidad y sentido de comunidad que había en ellos. Todo es destacable en la película: el excelente guión de Philip Dunne (basado en la novela de Richard Llewellyn), la preciosa y expresiva fotografía de Arthur Miller, la estupenda banda sonora de Alfred Newman, la perfecta dirección artística, el inmejorable reparto, etc. Uno de los grandes aciertos fue la elección del niño protagonista, Roddy McDowall, pues hace un interpretación a la vez tierna y decidida que hizo que su personaje se convirtiera en inolvidable. Los adultos están todos realmente extraordinarios: Walter Pidgeon, Maureen O´Hara, Donald Crisp, Anna Lee, etc. Y lo más importante no es que el nivel técnico o la calidad en general sea enorme, sino que se consigue porque es capaz de transmitir una cantidad de sentimientos impresionante, hace que el espectador se emocione con los planos del pueblo a la sombra de la torre minera, o de los silbatos que anuncian un accidente, o de las canciones de los galeses, o de la mirada del niño...
Imprescindible

viernes, 28 de octubre de 2011

La señora McGinty ha muerto

Película de 1964 dirigida por George Pollock. La señorita Marple es miembro de un jurado en un caso de asesinato que parece claro, pero ella opina que el acusado es inocente, al contrario que los otros 11 integrantes del mismo. Por ello, el juez no le condena y la sagaz señorita decide investigar el caso. Pronto se producirán más hechos que confirmarán que no estaba equivocada.
Entretenida aunque poco fiel adaptación de la novela homónima de Agatha Christie. Pollock recrea un caso muy interesante y nada fácil de adivinar, imprimiendo un ritmo algo irregular, pues tan pronto se detiene en el desarrollo como ocurren varias cosas a la vez. Le falta algo más de fondo a la investigación y de explicación de la estrategia de Marple, lo cual hace que el espectador no siga bien del todo el caso. Tiene unas acertadas notas cómicas, ayudadas en gran medida por las maneras de la protagonista. La banda sonora de Ron Goodwin desentona bastante pues parece hecha para una comedia (como una screball) más que para un suspense, aunque tenga golpes de humor, lo que no ayuda para crear una atmósfera adecuada. Margaret Rutherford encarna muy bien a la detective aficionada y explota espléndidamente su lado cómico. El resto del reparto cumple su misión. En definitiva, un caso interesante con una buena protagonista pero que el director no consigue explotar las posibilidades de la trama.
Entretenida.

El mayor espectáculo del mundo

Película de 1952 dirigida por Cecil B. De Mille. Nos cuenta la dura pero apasionada vida de un gran circo de tres pistas desde la incertidumbre del comienzo de temporada y durante varias de sus paradas, mostrando su magia, belleza y las relaciones entre sus componentes.
De Mille rinde un grandioso homenaje al mundo del circo con esta producción de comienzos de los 50. Utilizando de excusa un triángulo, cuadrado o hasta pentágono amoroso y la intriga de la misteriosa identidad de un entrañable payaso, nos muestra la magia del circo. Por un lado nos enseña lo duro que es la vida nómada de los componentes del circo, con grandes dosis de compañerismo e ilusión, pero también de celos, envidias e incertidumbre. Y por otro lado muestra un largo recital de números circenses de todo tipo, acrobáticos y cómicos. La primera perspectiva es interesante y está bien conseguida gracias principalmente al estupendo grupo de actores. La segunda acaba siendo algo pesada puesto que dedica muchos minutos a números circenses que, aunque se empiezan a ver con agrado, terminan por aburrir al espectador. Si se le quitaran 45 minutos de estos números (que también habría que decir que han perdido mucho con el paso del tiempo) quedaría una película mucho más ágil y entretenida. El reparto lo encabezan Charlton Heston y James Stewart, y tienen como compañeros a Gloria Grahame, Dorothy Lamour, Betty Hutton, etc.
Bonito homenaje al circo aunque excesivamente larga.

martes, 25 de octubre de 2011

Mata Hari

Película de 1931 dirigida por George Fitzmaurice. Durante la I Guerra Mundial una famosa bailarina en París es sospechosa de ser espía para los alemanes. Su fama y belleza son utilizadas para conquistar a oficiales rusos que estén en posesión de importantes secretos, pero no engaña al responsable de la inteligencia francesa que intenta conseguir pruebas para fusilarla.
La cinta es un puro vehículo para el lucimiento de una de las mayores divas del 7º arte, si no la mayor, Greta Garbo. El papel le encaja muy bien: una chica bella que utiliza sus encantos para engatusar oficiales del ejército y obtener información confidencial que luego pasa al enemigo. Por naturaleza la Garbo es enigmática, por lo que encarna muy bien a la mítica espía. Pero la manera que Fitzmaurice lo lleva a la gran pantalla no es acertada, pues carece de la más mínima credibilidad (no se trata si de se ciñe a la realidad, sino que nadie puede creerse la acaramelada versión que vemos). En ningún momento llegamos a creer la edulcorada trama, pero conforme nos acercamos al final se va introduciendo en una espiral cada vez más inverosimil. Aún así, si obviamos esta última parte, la película es entretenida gracias al juego de espías y cómo Mata Hari va jugando a varias bandas para conseguir sus objetivos. Los actores que acompañan a la diva están bastante bien aunque sólo sirvan de plataforma para mayor brillo de ella: Lionel Barrymore, Ramon Novarro, Lewis Stone, etc. William H. Daniels es el responsable de una sorprendente fotografía, más considerando que estamos justo comenzando los años 30.
Para fans de la Garbo.

domingo, 23 de octubre de 2011

La barrera invisible

Película de 1947 dirigida por Elia Kazan. Un periodista recibe el encargo del director de la revista de escribir una serie de artículos sobre el antisemitismo, pero de una manera real, que hable de las personas y no de estadísticas. Tras darle muchas vueltas al asunto y a punto de renunciar, finalmente se le ocurre hacerse pasar por un judío en Manhattan para ver qué trato recibe en general. No podrá imaginar la repercusión que tendrá en su vida.
Kazan se dispuso a remover la conciencia del pueblo americano, especialmente a esa mayoría de buen corazón pero que tolera el mal comportamiento de los demás (lo conocido como "ni una mala palabra ni una buena acción"). Aborda el tema del racismo religioso, concretamente contra los judíos, en una nación que fue creada por unos pioneros de origen multicultural, multiracial y multireligiosa. El guión de Moss Hart tiene el gran acierto de un estupendo enfoque del asunto, acompañado de un buen desarrollo del mismo gracias a unos personajes muy buenos y unos trabajados diálogos. Transmite credibilidad, lo cual es crucial para una película que denuncia una actitud que se da en la sociedad del momento, y en buena medida lo hace gracias a las relaciones verosímiles entre los diferentes personajes. Tiene un espléndido reparto encabezado por el excelente Gregory Peck (de nuevo como el perfecto padre americano), John Garfield, Dorothy Garfield, Celeste Holm, etc. También destacan la música de Alfred Newman y la fotografía de Arthur Miller.
Buena película sobre un tema delicado.

sábado, 22 de octubre de 2011

Gran Torino

Excelente película de 2008 dirigida por el maestro Clint Eastwood. Un veterano de la guerra de Corea acaba de perder a su esposa, lo que unido a su carácter férreo y áspero hace que se distancie más de sus hijos. Sus nuevos vecinos, como la mayoría de su barrio, son orientales, lo cual no le gusta demasiado. Su principal tesoro es su Gran Torino del 72, al que le gusta cuidar y lucir. Por accidente empezará a entablar relación con los vecinos quienes verán el tipo de persona que realmente es y que cambiarán su vida.
Eastwood vuelve a demostrar que se encuentra en una forma envidiable con 78 años, capaz de hacer el mejor cine del momento aunque sea con pocos medios y actores poco conocidos. Nos cuenta una historia que podía ser real, que refleja la situación y valores de la sociedad americana (al menos, de una parte), sin grandes pretensiones pero con un profundo calado moral. Y lo hace de una manera amena, con su parte dramática pero también con un lado cómico que nos hará reir con el viejo cascarrabias, y dejando el mensaje moral íntegro. Cuenta con un extraordinario guión de Nick Schenk que nos deja uno de los protagonistas más carismáticos que hemos visto y unos diálogos soberbios (el irreverente y malhumorado veterano recuerda un poco al inolvidable Henry Fonda en El estanque dorado). Tiene la virtud de combinar una historia dramática con toques de humor para amenizarla y sin perder una pizca del sentido moral que contiene. Eastwood está genial como director, pero como actor está inconmensurable, pues encarna a la perfección a este personaje gruñon pero de corazón honesto. Su interpretación es el alma de la película, sus gestos y, especialmente, las expresiones de su cara son magistrales. Una exhibición de talento y sensibilidad.
Imprescindible.

viernes, 21 de octubre de 2011

Bedevilled

Película de 1955 dirigida por el maestro Mitchell Leisen. Dos jóvenes americanos va a Paris para comenzar el seminario católico. A su llegada, uno se queda en el hotel descansando y el otro aprovecha para pasear por la ciudad. Accidentalmente conoce a una enigmática mujer que parece estar en peligro, por lo que que intenta ayudarla. Pero los peligros que implican esta ayuda son mayores de los que puede imaginar.
Una de las últimas películas que dirigió el gran Leisen volviendo al terreno del suspense (terreno que demostró dominar con la espléndida Mentira latente) aunque con poco acierto. El guión de Jo Eisinger tiene una buena presentación, un nudo demasiado superficial que no consigue crear el misterio que podía con esta trama y un fallido final. Leisen le da su sello de elegancia cuidando la realización, además de brindarnos algunas panorámicas por París muy bellas. El ritmo no está mal pero el interés va decayendo cuando el espectador percibe que el argumento no profundiza más en el misterio y sólo le queda alguna duda que despejar. La impresión es que hay una importante influencia de Hitchcock en toda la cinta, pero queda muy lejos de la calidad y suspense que éste conseguía. El protagonista masculino tampoco ayuda a crear la atmósfera apropiada, pues Steve Forrest parece de cera o madera en sus escenas, absolutamente sin intensidad ni matices. Por otro lado, Anne Baxter sale airosa del papel pero sin lucirse (es poco creíble que tenga la edad que dice su personaje ya que en realidad casi lo doblaba). Mejor están los secundarios con trabajos mucho más verosímiles.
Poco lograda cinta de suspense.

La máscara

Comedia de 1994 dirigida por Chuck Russell. Un empleado de banco educado pero que siempre reprime sus impulsos encuentra por casualidad una máscara de madera. Cuando se la pone se convierte en un ser todopoderoso que puede hacer todo lo que para él era impensable.
Se trata de la adaptación de un cómic y que se rueda como tal. El personaje le permite a su protagonista, Jim Carrey, multiplicar sus muecas y gestos porque éstos son amplificados con efectos especiales. Se puede decir que apenas hay argumento, tan solo lucimiento de efectos e imaginación. Tiene algunas escenas muy simpáticas y conseguidas, incluyendo un par de buenos números musicales. Russell explota el don de Carrey y le imprime a la película la gracia de los dibujos animados, pero pierde la oportunidad de contar algo mejor. Tiene un buen maquillaje, un acertado vestuario y estupendos efectos especiales.
Simpática si no se odia al histriónico protagonista.

jueves, 20 de octubre de 2011

La tienda de los horrores

Comedia de 1960 dirigida por Roger Corman. En una pequeña floristería el torpe empleado que el dueño está a punto de despedir crea una planta llamativa y novedosa. Va creciendo como a golpes para sorpresa de todos y llama tanto la atención que lo nominan para un conocido premio botánico. Pero sólo su creador conoce, por casualidad, el terrible secreto de tal crecimiento.
Con el tiempo esta cinta ha llegado a ser una película de culto aunque es difícil saber el motivo. Es una parodia de las películas de terror que es narrada por el policía que descubre los hechos. Es muy modesta y contó con pocos medios, sólo un puñado de actores y mucha imaginación. La historia es absurda pero la forma de contarla y alguna que otra ingeniosa escena nos hará sonreir. Sobran algunos aspectos teóricamente cómicos como tropiezos, caídas y otras torpezas, ya que sólo la hacen parecer más tonta de lo que es. En general, tiene cierto encanto y gracia, también el interés de haber cautivado a muchos espectadores, pero no más. Sí que llama la atención la corta escena en el dentista coprotagonizada por un jovencísimo Jack Nicholson en una de sus primeras apariciones en la pantalla.
Curiosa y simpática.

miércoles, 19 de octubre de 2011

Thor

Película de 2011 dirigida por Kenneth Branagh. Thor es el hijo del rey Odin, quien decide desterrarlo a la Tierra porque su arrogancia ha puesto a su pueblo al borde de una guerra. Luego descubre que su hermano menor está ultimando un plan para deshacerse del padre para alcanzar el trono e incluso envía a la Tierra a un robot asesino para asegurar que Thor no vuelva y le dispute la corona.
Branagh se introduce en el terreno de la mitología y superhéroes con esta fallida cinta. Las expectativas creadas son altas gracias al reparto y director elegidos para llevar a la pantalla otro cómic de la Marvel, lo cual hace que la desilusión sea mayor que si el equipo hubiera sido otro menos conocido. Esta historia está lejos de las conocidas adaptaciones shakespearianas de Branagh, lo que se traduce en una falta de acierto por parte de éste. El guión de Mark Protosevich es pobre y falto de imaginación, queriendo por un lado condensar muchas cosas para explicar la aventura y por otro haciendo ésta demasiado plana e infantil. No atrapa en ningún momento al espectador ni tiene la magia que se le supone al tratar de mundos "mágicos" y seres extraños. Carece de realismo e intensidad incluso en las batallas. El reparto tiene grandes estrellas como Anthony Hopkins, Natalie Portman y Samuel L. Jackson, pero ni éstos se lucen ni los que le acompañan realizan interpretaciones decentes, rozando algunas escenas en lo ridículo (también por los diálogos).
Poco interesante y hasta algo aburrida.

lunes, 17 de octubre de 2011

La vida de Émile Zola

Película biográfica de 1937 dirigida por William Dieterle. Nos cuenta la vida artística del conocido escritor francés y, muy especialmente, su implicación en un caso militar que tuvo gran repercusión por estar involucrado el Estado Mayor del ejército en una condena injusta de traición.
Aunque todos hayamos oído hablar de Zola, son pocos los que conocen los diversos avatares por los que pasó el escritor y cómo se embarcó en proyectos como el caso Dreyfuss que le suponían mucho riesgo con el solo objetivo de defender la verdad. Dieterle realiza un retrato entretenido y bastante idealista de este hombre que hace que el espectador disfrute un rato a la vez que recibe una lección moral. El guión de Raine, Herald y Herczeg es excelente, fluye muy bien a pesar de cubrir un período amplio de la vida del autor y tiene algunos diálogos inolvidables. Y, afortunadamente, cuenta con actores que le dan vigor y autenticidad a esos diálogos, como el alegato en el juicio u otros momentos, en los que un genial Paul Muni deja asombrados a todos. El actor hace un trabajo soberbio interpretando durante la mayor parte de la película a un hombre de avanzada edad cuando él rondaba los 40 (sorprende que unos años antes fuera nada más y nada menos que Scarface). Le acompañan estupendos actores como Donald Crisp, Joseph Schildkraut y Henry O´Neill.
Buena película que repasa la vida de este escritor y luchador de la verdad.

sábado, 15 de octubre de 2011

El último samurai

Película de 2003 dirigida por Edward Zwick. Tras la guerra civil y las campañas contra los indios, un desencantado capitán del ejército americano es contratado por el embajador japonés para que adiestre a su ejército que se encuentra enfrentándose a una rebelión de los samurais. El gobierno americano espera que esta relación le sirva para venderle armas a Japón. El capitán comienza su misión y en poco tiempo se ve obligado a iniciar una batalla, en la que cae preso de su enemigo. Esta situación le cambiará la vida.
Zwick nos deja una espectacular cinta, tanto en las brillantes escenas bélicas como en las más calmadas y profundas. Él mismo es coautor del guión junto con Logan y Herskovitz, inspirándose en el suceso real de la rebelión Satsuma ocurrida en Japón en la época en la que se basa esta historia. La pena es que le añaden varios aspectos (las llamadas "americanadas") que le quitan credibilidad y no le aportan nada, pues podían haber contado lo mismo pero mucho mejor si hubieran buscado otra manera de "meter" a un extranjero en la rebelión samurai. El argumento recuerda un poco a Bailando con lobos y el estilo de las espectaculares batallas a Braveheart. Sin embargo, Zwick no consigue la intensidad de ninguna de ellas aunque sí una buena película. Tiene un excelente diseño de producción, una magnífica dirección artística y de vestuario, una bella banda sonora de Hans Zimmer y una bonita fotografía de John Toll. Todos los aspectos están muy cuidados y eso se nota en el resultado. Las interpretaciones también están a la altura, destacando muy especialmente las del bando japonés: Ken Watanabe, Koyuki, Masato Harada, etc. Tom Cruise va de menos a más y hace un buen papel pero no llega a hacer sombra a Watanabe a pesar de ser la estrella absoluta.
Bonita e interesante historia rodada con mucha calidad.

viernes, 14 de octubre de 2011

Un enemigo del pueblo

Película de 1978 dirigida por George Schaefer. El médico del balneario de un pequeño pueblo descubre que las aguas, supuestamente medicinales, están contaminadas y hacen enfermar a la gente que las usa. El balneario es el motor del pueblo, por lo que esta noticia puede tener efectos fatales sobre la economía local. El alcalde, que es hermano del médico, le pide que no difunda la noticia, pero éste insiste en que se sepa la verdad. Le advierte que, de lo contrario, luchará contra él y no dudará en poner en entredicho su reputación.
Basándose en la obra de Henrik Ibsen, Arthur Miller y Alexander Jacobs elaboraron un guión que dejara una moraleja importante para el espectador. Se hace un buen planteamiento, se va desarrollando bien (aunque le falta más intensidad a la lucha que emprende el protagonista y a los ataques que sufre) pero el final es brusco y le falta un desenlace adecuado, pues cuando parece que va a cobrar más tensión se termina. Eso deja mal sabor de boca a pesar de que el planteamiento tiene sus aciertos, la lección queda patente y algunos de los diálogos son excelentes. Lo mejor es su reparto, encabezado con la seria presencia de su protagonista, Steve McQueen, en una de sus últimas interpretaciones y también involucrado en la producción. Es una pena que esté "parcialmente escondido" detrás de unas barbas y peluca enormes, pero transmite una sobriedad y realismo estupendos. Le acompañan buenos actores que también están a buen nivel, como Charles Durning, Bibi Andersson y Michael Higgins. Está rodada con pocos medios y Shaefer utiliza pocos artificios para centrarse en la historia, los diálogos el trabajo de sus actores.
Interesante historia bien escrita e interpretada pero le falta intensidad y un final mejor.


The way


Película de 2010 dirigida por Emilio Estevez. Un padre americano que vive en California recibe una llamada de la policía francesa para comunicarle que su hijo ha fallecido iniciando el camino de Santiago. Absolutamente trastornado a pesar de que se había distanciado algo de él desde el fallecimiento de su esposa, se dirige al Pirineo francés para reconocer el cadáver. Una vez allí decide iniciar el camino que su hijo acababa de empezar.
Emilio Estevez da todo un homenaje a la tierra de su abuelo y al camino de Santiago. Lo protagoniza su padre, Martin Sheen, uniéndose al homenaje a su propio padre. Promociona el conocido camino mostrando el viaje que hace un padre al perder a su hijo y cómo éste va enfrentándose a sus propios pensamientos y sentimientos a la vez que a la soledad inicial. Va conociendo a varios peregrinos que acaban formando un pequeño grupo que avanza junto. Al principio él no se encuentra cómodo con la compañía pero poco a poco se va abriendo a ellos y éstos le ayudan a realizar su objetivo. Ese encuentro y desencuentros con los que conforman el grupo, las aventuras que van sufriendo en las numerosas etapas del camino y las fases por la que pasa el protagonista hacen que la película sea entretenida aunque con algunos momentos más conseguidos que otros. Para el espectador español lamentablemente cae en muchos tópicos que consigue restar realismo a la historia pero que son casi obligados para un público internacional. En general, es tierna y se deja ver bastante bien. Tiene una bonita banda sonora con una gran selección de temas. El aspecto negativo que más destaca es la fotografía pues tiene escenas para lucirse, tanto exteriores como interiores, y no sólo no aprovecha la oportunidad sino que las desluce, especialmente por una pésima iluminación.
Bonita aunque algo superficial y con tópicos nacionales.

miércoles, 12 de octubre de 2011

El exorcista

Clásico del cine de terror de 1973 dirigido por William Friedkin. Una niña de 12 años empieza a sufrir trastornos en su comportamiento, por lo que la madre decide llevarla al médico y someterla a diferentes pruebas. Van descartando todo tipo de lesiones cerebrales mientras el comportamiento de la niña va radicalizándose e incluso llega a hacer cosas paranormales. Ante la desesperación recurre a un sacerdote para pedirle que le haga un exorcismo.
En poco tiempo se convirtió en todo un clásico y referente en el cine de terror. El guión de William Peter Blatty está basado en su propia novela homónima (un enorme éxito de ventas), la cual se inspiró en un exorcismo real realizado en Washington a mitad del siglo XX. El argumento hiela la sangre y deja al espectador pegado al asiento casi sin pestañear. Está bastante conseguida en todos los aspectos, destacando las interpretaciones, el maquillaje, la fotografía, la música y la dirección artística. Friedkin la rueda con bastante austeridad para que nada pueda despistar o interfererir sobre la trama principal, además hacerlo con gran realismo. Le imprime un ritmo bajo pero que contribuye a subir la tensión, aunque en algún momento sí que decae un poco (cosa que podía subsanarse con la eliminación o recorte de alguna escena). En el reparto destacan dos grandes veteranos como Max von Sydow y Lee J. Cobb, un debutante en el cine como Jason Miller, y las actrices Linda Blair y Ellen Burstyn. Hay muchas anécdotas o circunstancias extrañas alrededor de la película, pero sobresalen las muertes de dos actores a los pocos días de acabar sus escenas cuyos personajes también morían: Jack MacGowran (el director y pareja de la madre) y Gina Petruska.
Película de culto en el género del terror.

martes, 11 de octubre de 2011

X-Men: Primera generación

Precuela de la saga X-Men de 2011 dirigida por Matthew Vaughn. En el comienzo de los años 60 los mutantes aún desconocen que no son casos únicos y se empiezan a formar dos grupos, uno fomentado por la CIA y otro por un antiguo nazi que fue el reponsable de que Magneto explotara sus poderes. Este último está presionando a los americanos y a los rusos para provocar la III Guerra Mundial para terminar con la humanidad y dejar paso a la nueva generación de mutantes. El otro bando no sólo está apoyado por la CIA sino que realmente piensa en la posibilidad de que los humanos y los mutantes puedan vivir en armonía.
Espléndida nueva entrega de la saga con una precuela de la historia de los mutantes. La trama está bien pensada y enlazada con situaciones históricas muy conocidas, dándole un interés añadido. El aire de los 60 mezclado con la tecnología de la CIA y los poderes de la saga también queda de maravilla. El guión está bien elaborado y parece inspirado en películas de espionaje tipo 007. Tiene una buena mezcla de intriga, acción y ciencia ficción. Vaughn le imprime un ritmo muy bueno y cuida mucho toda la estética, pero sin descuidar el fondo. Cuenta con un buen reparto, serio y profesional aunque joven, liderado por un ya veterano Kevin Bacon y con el grupo compuesto por James McAvoy, Michael Fassbender, Oliver Platt, Rose Byrne, etc. Supone un inicio de la saga de buena calidad.
Estupenda cinta de aventuras y espionaje de la mano de superhéroes.

sábado, 8 de octubre de 2011

Sin sombra de sospecha

Película de 1947 dirigida por Michael Curtiz. Un conocido locutor radiofónico dedicado a narrar casos de asesinato sufre la pérdida de su secretaria al suicidarse. También pierde a su sobrina en un naufragio, lo que le hace heredar parte de una gran fortuna. Repentinamente aparece en su casa el marido de ésta, lo que le sorprende porque no sabía ni que se hubiera casado. Pero aún quedan otras cosas por ocurrir que harán que el locutor se vea inmerso en un caso como los que cuenta a los oyentes.
Curtiz se mueve con esta cinta entre el thriller policíaco y la intriga al estilo Hitchcock. La historia se basa en una novela de Charlotte Amstrong siendo Bess Meredith la responsable de la adaptación. Al principio explota más la intriga sobre lo que ocurre y juega a confundir al espectador sobre quién es el asesino, para luego ir dejando claro quién es el/la criminal convirtiéndose en un thriller y creando la tensión sobre si conseguirá su objetivo o le detendrán. La trama es interesante aunque la segunda parte, cuando ya se conoce la identidad del asesino, se vuelve algo más predecible aunque aún quedan bastantes acontecimientos por delante (incluso demasidos, perdiendo un poco la lógica y frialdad del comportamiento anterior). La ambientación está cuidada y la fotografía de Elwood Bredell es espléndida. El reparto está encabezado por un magnífico Claude Rains, quien marca el ritmo de todo y transmite lo que debe en cada momento, ya sea calidez o frialdad. El resto del reparto está bien pero lejos de aquél, como Joan Caulfield, Constance Bennet y Audrey Totter.
Entretenida cinta de misterio sobre asesinatos con calidad pero que va de más a menos.

El cisne

Película de 1956 dirigida por Charles Vidor. La acción se situa a principios del siglo XX en un país centroeuropeo donde el príncipe busca esposa. Manda un telegrama anunciando una visita al palacio de unos familiares, quienes tienen una hija joven y guapa a la que siempre han criado pensando en que un día llegaría a ser reina. A la chica no le entusiasma la idea pero se ve forzada por la ambición de la madre, que desciende de la antigua familia real del país y ve la oportunidad de recuperar el trono de esta manera.
Lo primero y que más llama la atención es la incomparable localización y estupenda dirección artística y de vestuario. El palacio está ricamente decorado con multitud de detalles, al igual que los vestidos y trajes que luce el reparto. El guión de John Dighton, que está basado en la obra de teatro de Ferenc Molnár, no llega a explotar las posibilidades que la trama ofrece. Vidor rueda con oficio y elegancia pero le falta fluidez en la narración y algún punto más álgido que le proporcione más contenido a la trama (que se queda demasiado superficial), lo que hace el espectador pueda ir perdiendo el interés que despertó al inicio. Cuenta con un buen equipo de actores, destacando a sir Alec Guinness, Agnes Moorehead, Grace Kelly (que curiosamente ese año dejó el oficio para casarse con un príncipe real), Leo G. Carroll, Louis Jordan, etc.
Visualmente elegante pero le falta fondo a la trama.

viernes, 7 de octubre de 2011

En busca del arca perdida

Película de 1981 dirigida por Steven Spielberg. El gobierno americano le pide ayuda a un reconocido arqueólogo buscador de reliquias porque saben que los nazis se encuentran en Egipto buscando algo. Por la información que les dan, Indiana Jones, el arqueólogo, adivina que los alemanes andan tras el Arca de la Alianza, y les convence para que les dejen ir a buscarla.
Spielberg demostró que era el auténtico rey Midas de Hollywood con esta película. Reinventó el cine de aventuras con una historia llena de acción, aventuras, imaginación, golpes de humor, etc. De principio a fin el espectador se encuentra en una montaña rusa con muchas situaciones límite, ya sea una enorme piedra, las hélices de un avión, serpientes....También acierta con situar la cinta temporalmente en 1936, pues le da a toda la trama un aire romántico mientras que consigue que el enemigo sea Hitler y su ejército. El guión de Lawrence Kasdan es una de las claves gracias al ingenio aplicado al elegir la misión, la enorme cantidad de situaciones complicadas a las que se enfrenta el protagonista, la sucesión constante de acción, el sentido del humor que introduce, etc. Le dio el espaldarazo definitivo a Harrison Ford como estrella o hasta galáctico, quien encarna perfectamente a este héroe encantador y duro, pero sensible. Spielberg demuestra su genio con el ritmo trepidante que imprime y cómo rueda cada escena, llegando para ello a inspirarse también en el mundo del comic.
Estupendo cine de aventuras.

jueves, 6 de octubre de 2011

Enemigo a las puertas

Película de 2001 dirigida por Jean-Jacques Annaud. Durante la batalla de Stalingrado un francotirador ruso va alcanzando gran popularidad por sus hazañas y gracias a que las autoridades lo utilizan como ejemplo de héroe para levantar la moral. Los alemanes deciden traer de Berlín a su mejor francotirador para que lo mate y acabar con los asesinatos que comete y, sobre todo, darle un serio golpe a la moral del ejército ruso.
Annaud lideró la mayor producción europea hasta la fecha basándose en este interesante episodio real. El marco es la batalla más sangrienta de la historia con más de cuatro millones de víctimas, en plena II Guerra Mundial. El ejército alemán quería apoderarse de Stanlingrado y contaba con un importante número de soldados y un gran equipamiento bélico. Los rusos no tenían ni siquiera armas suficientes (mandaban soldados sin fusil con la idea de que lo cogieran en el campo a alguna víctima) pero no paraban de mandar más personas al frente, hombres y mujeres. La situación era tan desesperada que Stalin dio la famosa orden de "ni un paso atrás", por la que los soldados eran acribillados por el propio ejército rojo si intentaban una retirada. Los mandos rusos decidieron que debían buscar héroes para levantar la moral de sus soldados, por lo que publicaban hazañas individuales y colectivas. Uno de los héroes fue un francotirador que causó decenas de bajas entre los oficiales nazis, por lo que éstos decidieron llevar a Stalingrado a su mejor francotirador. El duelo entre ambos fue apasionante.
Annaud consigue reproducir unas espectaculares escenas bélicas, como las centradas en el río. La ambientación es magnífica, al igual que el vestuario, consiguiendo llevarnos hasta esa ciudad y momento. Pero lo mejor es el duelo entre ambos francotiradores, pues el director consigue crear tensión e intriga con el juego del ratón y el gato. La trama es fluida y con buen ritmo, por lo que el espectador permanece atento todo el metraje. El reparto es un acierto, pues Jude Law y Ed Harris están espléndidos, Bob Hoskins también brilla a gran altura o más, y el resto están más que decentes, como Joseph Fiennes, Rachel Weisz, Ron Perlman, etc.
Estupenda cinta bélica basada en hechos reales.

miércoles, 5 de octubre de 2011

Los mejores años de nuestra vida

Magnífica película de 1946 dirigida por el maestro William Wyler. Tres veteranos de guerra de la misma ciudad se conocen en el avión de regreso a casa. No tienen nada en común salvo el hecho de haber luchado en la II Guerra Mundial y ser del mismo pueblo, pero aún así es suficiente para crear un lazo de amistad entre ellos. A pesar de la felicidad que sienten por la vuelta, están nerviosos por lo que supone retomar su antigua vida tras varios años y haber vivido una experiencia que les ha marcado para siempre, tanto físicamente en algún caso como psicológicamente. Tras ser recibidos como héroes empiezan a sufrir problemas de adaptación.
Es conocido que Hollywood y sus estrellas colaboraron de diferentes maneras con el ejército y sus soldados durante la II Guerra Mundial. Una vez ganada y dada la merecida bienvenida a los héroes, se pasó la página casi inmediatamente. Wyler, que había estado haciendo documentales en primera línea de fuego y por lo que se quedó parcialmente sordo, hizo esta película para volver a destacar el heroísmo de todos esos hombres que tuvieron que dejar sus vidas y volver a ellas varios años después tras haber vivido experiencias escalofriantes (matar a personas y ver morir a compañeros). Mostraba cómo el regreso no era nada sencillo, independientemente del rango, del cuerpo del ejército, las circunstancias familiares, económicas, etc. Estaban profundamente marcados y sus escalas de valores eran ahora distintas, y encontraban que la sociedad que les dio la bienvenida como héroes enseguida se tornó poco comprensiva y hasta hostil. Por todo ello, como reflexión y documento esta cinta es extraordinaria. Además, Wyler eleva la calidad hasta un nivel sobresaliente en todos los aspectos. La fotografía de Gregg Toland es excelente, brillando especialmente en las escenas con gran profundidad de campo (todas ellas preciosas); el guión de Robert E. Sherwood es uno de los pilares sobre el que Wyler construye esta espléndida obra; la dirección artística es impecable; la elegante dirección del maestro es genial; etc. El reparto es impresionante: Dana Andrews, Fredric March, Myrna Loy, Harold Russel (el único en ganar dos oscar por un papel, uno de ellos honorífico), Teresa Wright, Virgina Mayo,...
Imprescindible

martes, 4 de octubre de 2011

Becket

Película de 1964 dirigida por Peter Glenville. Narra la relación que hubo en el siglo XII en Inglaterra entre el rey normando Enrique II y el sajón Thomas Becket, pasando de la confianza plena, gracias a la cual le nombró canciller y arzobispo de Canterbury, al enfrentamiento más directo.
Glenville llevó a la gran pantalla la obra teatral de Jean Anouilh, siendo Edward Anhalt quien adaptó el guión. Hizo un gran trabajo pasando la trama de las tablas a la pantalla, todo con un gran rigor histórico y dando muchos detalles de los dos caracteres protagonistas y de la evolución de su relación. Los diálogos son ricos aunque a veces caiga algo en cierta pomposidad que le quita naturalidad a los mismos. La pieza clave, además del guión, es el acierto con el reparto con dos soberbios actores que interpretan de forma opuesta en esta ocasión: Peter O´Toole y Richard Burton. El primero roza o llega a la sobreactuación para dejar claro el tipo de personalidad que tenía el rey, mientras que el segundo hace una actuación muy contenida y parca. Destaca el exceso de O´Toole, aunque hay que decir que igual de meritoria es la sobriedad de Burton. Ambos hacen que esta cinta sea tan conocida y valorada. Junto a ellos también capta la atención John Gielgud como el rey de Francia. Los mayores defectos son que Glenville no siempre acierta con los tiempos que da a las escenas y el incluir algunas que no aportan nada, alargando innecesariamente el metraje de la película.
Interesante drama histórico aunque le sobran algunos minutos.

lunes, 3 de octubre de 2011

Poderosa Afrodita

Comedia de 1995 dirigida por Woody Allen. Una pareja decide adoptar un bebé y, conforme crece, se va sorprendiendo de su inteligencia. El padre empieza a obsesionarse con la idea de conocer a los padres biológicos mientras ve que su esposa es deseada por un inversor que le podría ayudar a abrir su propia galería de arte. Consigue conocer a la madre y mientras se acerca a ella se va distanciando de su mujer.
Allen cuenta una historia cómica y tierna introduciendo cortes de una obra mitológica griega, lo cual es sorprendente pero que va teniendo su gracia cuando mezcla ambos personajes y tramas. Recurre a dos de sus temas preferidos, el sexo y la relaciones de pareja, que domina a la perfección. La trama es bonita, casi un cuento, y el humor que tiene es ingenioso y afilado, aunque a veces recurre a cuestiones más ordinarias sobre el sexo. Allen también protagoniza la cinta, con un papel en el que lo hemos visto numerosas veces y que borda. Por la parte femenina tenemos a dos estupendas actrices, pero es Mira Sorvino quien se lleva todos los laureles con su magnífica interpretación. Helena Bonham Carter está bien pero con un papel que se presta menos al lucimiento, y le acompañan otros secundarios de lujo como F. Murray Abraham, Jack Warden, Olympia Dukakis, James Woods, Paul Giamatti, etc. Nos hace pasar un buen rato, con algunas escenas bastante divertidas, pero que no llega al nivel de las mejores obras del genio neoyorquino.
Simpática compedia de Woody Allen.

domingo, 2 de octubre de 2011

Asesinato a la orden

Película bastante desconocida de 1953 dirigida por Andrew L. Stone. Una adolescente es ingresada en el hospital con fuertes convulsiones. Vive con su hermano pequeño y los cuida su madrastra tras el fallecimiento de su padre. Al hospital también acude el hermano del padre, quien queda muy preocupado tras el fallecimiento de la chica. El sobrino le cuenta que el padre murió de forma similar, lo que al comentarlo con unos amigos hace que empiecen a surgir dudas sobre el origen de sendas muertes.

Stone escribe y dirige esta cinta que bien podría basarse en una de las novelas de Agatha Christie por la forma de crear y contar el misterio, aunque tiene menos sospechosos que lo habitual en las obras de la maestra del suspense. También ayuda mucho el hecho de contar como protagonista a Joseph Cotten porque, además de ser un grandísimo actor, sus papeles anteriores como asesino hacen que el espectador aumente la desconfianza hacia él, desconcertándolo más de lo que hubiera ocurrido con otro actor. La trama es sencilla y crea una buena atmósfera de suspense, basándose la intriga más en la duda sobre un sospechoso que sobre quién pudo ser el criminal. Esa tensión va creciendo hasta la escena final que está muy conseguida. Se nota que la producción es bastante modesta y se ve en muchos detalles que no están muy cuidados, pero no afecta al desarrollo de la trama. Además del mencionado Cotten, cuenta con buenos secundarios como Jean Peters, Gary Merrill y Catherine McLeod, bajando mucho el nivel a partir de ellos.

Entretenida e interesante obra de suspense.

sábado, 1 de octubre de 2011

Cautivos del mal

Obra maestra de Vincente Minnelli de 1952. Un antiguo productor de cine llama a tres estrellas con las que trabajó en el pasado: un director, un guionista y una actriz. Ninguno escucha lo que quiere proponerles, por lo que recurre a otro productor con el que colaboró para que intermedie. Éste les llama y repasa las relaciones que tuvieron los tres con esta persona para recordarles que, aunque tienen motivos para mantener un gran rencor, también les ayudó a lanzar sus exitosas carreras.

Una de las obras cumbres de este genio del séptimo arte y considerada como de las mejores de la Historia. Parte de un excelente guión de Charles Schnee, con unos personajes de gran fuerza (el protagonista es mítico) y unos diálogos excepcionales. Minnelli imprime una gran elegancia, un ritmo impecable y un carácter único a los personajes. Capta al espectador desde el inicio y lo mantiene atrapado durante todo el metraje. Otro de los puntales es la fotografía de Robert Surtees, quien juega con las sombras como pocos lo han hecho, y le da una textura especial consiguiendo resaltar las diferentes personalidades de los protagonistas. Y la última pieza clave es el reparto, encabezado por (posiblemente) el mejor Kirk Douglas que podamos recordar. Encarna a la perfección toda la pasión que siente su personaje, la transmite y hasta contagia. Consigue ensombrecer a todos los que le rodean y ello a pesar de contar con un reparto de lujo: Lana Turner, Walter Pidgeon, Gloria Grahame, Dick Powell, Leo G. Carroll, etc. También destaca la espléndida dirección artística y el vestuario.

Imprescindible.

Terremoto

Película de 1974 dirigida por Mark Robson. La ciudad de Los Ángeles sufre un pequeño terremoto una mañana, lo cual sirve para que un joven sismólogo pueda predecir que en pocas horas ocurrirá uno mucho mayor. A pesar de comunicarlo a las autoridades y que éstas le presten cierta credibilidad, sólo pueden alertar a los servicios de emergencia y al control de la presa que hay a las afueras.

Robson quiso explotar el filón del cine de catástrofes que había abierto películas como Aeropuerto, coincidiendo ese mismo año con una obra mucho mejor y más entretenida: El coloso en llamas. Sigue el patrón típico: presenta varias historias personales, luego se produce la catástrofe y nos enseña el efecto dramático en dichos personajes. La presentación puede ser algo excesiva, pero sin duda sobra algún personaje y se podía haber encontrado algunas alternativas mucho más interesantes. Los efectos están bien conseguidos para la época salvo unos planos generales que debían haberse ahorrado. Robson consigue crear tensión e intriga en ciertos momentos y aprovecha las réplicas para dar sucesivas vueltas de tuerca a las diversas situaciones que nos enseña. No obstante, alguna de esas historias pretende cargar dramáticamente aún más la trama y sólo le quita fluidez al desarrollo de las otras y credibilidad. Igual ocurre con el reparto, que nadie puede tragarse que Ava Gardner sea hija de Lorne Green, y el resto suele caer en una sobreinterpretación innecesaria. Poco arreglan las presencias de Charlton Heston y George Kennedy.

Para pasar el rato viendo una catástrofe.