Película de 1943 dirigida por Jean Renoir. Un pueblo es tomado por el ejército nazi y va viviendo una pseudonormalidad bajo una vigilancia muy estrecha de los alemanes. Hay discretos movimientos de la resistencia que van aumentando en intensidad hasta que acaban matando a algunos soldados nazis. Esto provoca que tomen rehenes para que el culpable se entregue.Renoir plasma una situación que debía repetirse en aquella época, plena II Guerra Mundial, a lo largo del continente europeo. Toma como protagonista a un débil y cobarde profesor brillantemente interpretado por el gran Charles Laughton, quien acabará viviendo una situación muy complicada. La cinta constituye un elemento de propaganda para los aliados destinada a los USA de manera que los americanos pudieran tener una visión más completa de lo que suponía para la población la invasión germana. Se rueda con mucho tacto y siempre queriendo mostrar aspectos de la ideología del régimen nazi y no tanto la barbarie y crímenes de civiles que el ejército realizaba. Por lo tanto, da una perspectiva demasiado educada, contenida y/o correcta de los soldados, según luego hemos sabido. Al grandísimo Laughton le acompañan magníficos actores como Maureen O'Hara, George Sanders y Una O´Connor (quien coincidiría nuevamente con Laughton en la magistral Testigo de Cargo). Buena fotografía de Frank Redman.
Buena e interesante película sobre la ocupación bélica de un pueblo.
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