Película de 1997 dirigida por Mike Newell. Un agente del FBI logra infiltrarse en la mafia neoyorquina, en la familia criminal Bonanno, convenciendo a uno de sus miembros que es alguien de fiar. Éste tiene aspiraciones e intentará suceder al actual capo, pero no será fácil pues la competencia es alta. Mientras tanto, la familia del agente vive sola sin saber qué es de él salvo algún contacto casual.
Adaptación de la novela que escribió el protagonista de esta historia real, Joseph D. Pistone, sobre la arriesgada misión que asumió infiltrándose seis años en la mafia. Llama mucho la atención el valor y sacrificio de un hombre, honrado y cabeza de familia, con el fin de atrapar a un grupo de criminales. Y por esto destaca la escena final, toda una crítica al sistema y que deja avergonzado a quien lo vea. La historia retrata a una mafia en decadencia y tiene como protagonista al policía infiltrado y a un mafioso con aspiraciones pero fracasado en realidad. Por lo tanto, lo tiene todo para hacer una obra de gran nivel pero Newell no aprovecha el material y se queda muy en la superficie, una pena. Tiene un buen reparto, con el gran Al Pacino que ensombrece a los demás, un Johnny Depp que deja que desear, y algunos secundarios que demuestran su gran encaje con los caracteres y talento como Michael Madsen. El resultado es una buena película sobre la mafia más reciente pero que deja la sensación de no haber captado mejor el fondo de la organización, relaciones y personajes.
Buena.
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