martes, 31 de agosto de 2010

Sherlock Holmes y la máscara de la muerte

Telefilme de 1984 con una aventura muy interesante del famoso detective creado por Sir Arthur Conan Doyle. Sherlock Holmes se encuentra jubilado pero regresa a Londres llamado por el detective jefe de Scotland Yard para que le ayude en un extraño caso de asesinatos donde los cadáveres aparecen sin causas aparentes de las muertes y con los rostros terriblemente asustados. Pero debe dejar el caso para centrarse en otro que le encomienda el mismísimo ministro del interior y que es de importancia nacional.
Peter Cushing es un digno Sherlock, especialmente teniendo en cuenta que se encuentra ya jubilado. Hace una interpretación acorde a esa edad, más contenida y reflexiva que otras que hemos visto. Lo vemos con todos sus tópicos: disfraces, usando pipa y gorro, tocando el violín, etc, aunque sin mención a su inclinación por las drogas. Aparece brevemente Ray Milland como el ministro del interior, ya con avanzada edad. Anne Baxter da vida a su amada-enemiga Irene Adler, y Gordon Jackson es el amigo que le trae a Londres al pedirle ayuda en su investigación. Por lo tanto, un reparto más que ilustre. La trama es ingeniosa y despierta el interés del espectador, pero no se desarrolla adecuadamente ni se le saca todo su potencial (en buena medida al ser un producto para la televisión de escasa duración). El guión busca una rápida resolución de los casos y no llega a definir bien los personajes, las relaciones, los hechos y las reflexiones del detective. Una pena porque realmente se podía haber realizado una gran película.
En definitiva, buen argumento para las aventuras de este gran detective que nos entretendrá durante la hora y cuarto que dura.

Asesino implacable

Interesante muestra de cine negro de 1971 dirigida por Mike Hodges en lo que supuso su debut (y su mejor cinta). Es la historia de un asesino que se desplaza de Londres a Newcastle a descubrir quién hay detrás de la muerte de su hermano, quien aparentemente se ha suicidado. Se encuentra con una mafia local metida en diversos asuntos turbios. Enfrentándose sólo a toda esa red tratará de cazar a los culpables.
El director muestra con toda frialdad un ambiente sórdido reflejada en esa ciudad sucia y deprimente. La violencia, el sexo, el juego y las drogas son parte de ella. Va desenvolviendo muy adecuadamente la trama, con buen ritmo narrativo, hasta que descubrimos por qué y cómo su hermano fue asesinado. Cuenta con un estupendo final. El alma de la película es Michael Caine con una extraordinaria interpretación de una persona sin alma, sin sentimientos y con un cínico sentido del humor. Su rostro y, especialmente, sus ojos fríos e imperturbables son increíbles. El mayor inconveniente es que intervienen muchos personajes que son referidos por sus nombres y entre los que el espectador se pierde para seguir las investigaciones del protagonista.
Entretenida y buena muestra de este género en color.

lunes, 30 de agosto de 2010

Marty

Pequeña joya de 1955 dirigida magistralmente por el debutante Delbert Mann. Pequeña no por la calidad, sino por la duración, por la sencillez, por la modestia. Es la historia de un hombre bueno pero no muy agraciado con un entorno personal cada vez más complicado y que conoce a una chica en similares circunstancias. Es asombrosamente real, nada de "modelos" con una ejemplar o sorprendente historia de amor. Habla de la superficialidad e hipocresía de la gente, de la importancia del físico, de la crueldad de la juventud (física o mental), que rápidamente etiqueta negativamente a los menos agraciados haciéndolos sentir desdichados. El guión es una maravilla de sensatez y desarrolla unos personajes sencillos pero muy reales y profundos, con creíbles relaciones entre ellos. Ernest Borgnine está impresionante, muy lejos de los papeles de hombre rudo que suele hacer. Transmite sensibilidad, amor, dolor, inquietud, tristeza, alegría,... Un personaje inolvidable con una interpretación insuperable que enamora al espectador. El resto de actores están muy bien, pero Marty les hace sobra a todos, incluso a su amada Betsy Blair.
Película que hay que ver para disfrutar del cine y recibir una lección de humanidad.

domingo, 29 de agosto de 2010

Sólo los ángeles tienen alas

Película de 1939 dirigida por el genial Howard Hawks y considerada por muchos como una obra maestra. Narra las aventuras de un grupo de pilotos que trabajan en una ciudad portuaria sudamericana y que se ganan la vida llevando el correo en avioneta a través de las altas montañas que les rodean. El peligro forma parte de sus vidas y lo afrontan de una manera peculiar para poder seguir adelante. Una visitante casual se enamora del jefe de los pilotos e intentará entender y formar parte de esta vida.
Está realizada extraordiariamente, con grandes escenas de los arriesgados vuelos atravesando las montañas con climas muy adversos. Realmente interesantes y conseguidas estas escenas que le aportan tensión y emoción a la cinta. Los personajes están claramente definidos, destacando a un joven Cary Grant y a magnífico Thomas Mitchell. Además, fue el debut de Rita Hayworth, quien aún teniendo un pequeño papel, supera a la protagonista Jean Arthur. El guión es bueno, con diálogos ágiles y un final soberbio (la manera de Cary Grant de pedir lo que desea). Pero a pesar de la calidad de la realización y de la maestría con que está dirigida, le falta algo más a la relación entre los personajes (que no a las aventuras), algo que le añada más intensidad y realismo a cómo se desarrollan y mantienen esas relaciones.
Buena película, de gran calidad pero sin alcanzar la de otras de este director o de sus protagonistas.

Sólo los ángeles tienen alas

Película de 1939 dirigida por el genial Howard Hawks y considerada por muchos como una obra maestra. Narra las aventuras de un grupo de pilotos que trabajan en una ciudad portuaria sudamericana y que se ganan la vida llevando el correo en avioneta a través de las altas montañas que les rodean. El peligro forma parte de sus vidas y lo afrontan de una manera peculiar para poder seguir adelante. Una visitante casual se enamora del jefe de los pilotos e intentará entender y formar parte de esta vida.
Está realizada extraordiariamente, con grandes escenas de los arriesgados vuelos atravesando las montañas con climas muy adversos. Los personajes están claramente definidos, destacando a un joven Cary Grant y a magnífico Thomas Mitchell. Además, fue el debut de Rita Hayworth, quien aún teniendo un pequeño papel, supera a la protagonista Jean Arthur. El guión es muy bueno, con diálogos ágiles y un final soberbio (la manera de Cary Grant de pedir lo que desea)

Suspense

Gran historia de fantasmas de 1961 con una sobresaliente dirección de Jack Clayton y guión de Truman Capote basado en la novela "The turn of the screw" de Henry James. Desde antes de la primera toma ya nos inquieta con la canción que se repite continuamente "O willow waly". La trama consiste en el encargo a una institutriz de cuidar a dos hermanos que viven en una casa de campo junto a varios sirvientes. Cuando ésta llega se encuentra a dos tiernos y educados niños pero va descubriendo que dos empleados que murieron tiempo atrás aún intervienen en la vida de los que habitan la casa. Tiene algunos ingredientes clásicos para hacer una cinta de terror: gran mansión, amplios jardines con lago incluido, sirvientes, niños, tragedias ocurridas con anterioridad, institutriz....Y todo mezclado y desarrollado inteligentemente para ir aumentando la tensión en el espectador. Clayton nos da una visión ambigüa tanto de los hechos como de los personajes, especialmente con los niños (espléndidas interpretaciones de ambos, increíblemente perturbadores y malignos). Éstos nos harán removernos en nuestros asientos, dudando de lo que vemos y esperando cualquier cosa de ellos en cada escena. También nos surgirán dudas de la aparentemente bienintencionada institutriz, brillantemente encarnada por Deborah Kerr. La música y la fotografía contribuyen a crear esa atmósfera de tensión pretendida por el director.
Muy recomendable película de terror psicológico.

sábado, 28 de agosto de 2010

Avatar


Impresionante película de 2009 dirigida por el "rey del mundo" James Cameron. Entre otras cosas, pasará a la historia como la película que convenció a la gente a ponerse gafas en el cine, de impulsar el 3D. Es el mejor ejemplo de cine para ver en la sala para captar y disfrutar toda su magia. Tiene una estética y una calidad de realización extraordinarios, mostrándonos un gran espectáculo. Pero no sólo es visualmente maravillosa, sino que cuenta una buena historia. Básicamente se trata del relato de Pocahontas cambiando continentes por planetas, siendo el auténtico protagonista el planeta Pandora y los humanoides que viven en completo equilibrio con su entorno.
Cameron ha estado más de 10 años trabajando en este proyecto y, según dijo, esperando a que hubiera la tecnología apropiada para contar esta historia y mostrar ese mundo que tenía en mente. Y lo consiguió. Gracias a su perfeccionismo, nos muestra con todo detalle un mundo imaginario con su flora, fauna, misterios, belleza, peligros, lenguaje,... Pero toda esa tecnología es usada para respaldar y dar más credibilidad a la historia. Ésta es un drama romántico con mensajes ecológicos y antibelicistas, nada especialmente original pero bien contada.
Además hay que destacar la banda sonora de James Horner y el "rescate" de Sigourney Weaver, quien vuelve a demostrar su buen hacer.
No defraudará aunque pierde espectacularidad al verla en televisión.

viernes, 27 de agosto de 2010

No es tan fácil


Simpática comedia romántica de 2009 dirigida por Nancy Meyers. La fórmula usada es similar a su exitosa Cuando menos te lo esperas, pero no llega a alcanzar el mismo nivel, aunque es entretenida. Cuenta la historia de una pareja de divorciados que tras 10 años separados comienzan una aventura a pesar de estar él nuevamente casado. Con 3 hijos adultos en común y dos vidas que están en puntos muy distintos (él casado y con un niño, ella intentando empezar una relación) da lugar a situaciones divertidas.
Meyers aborda nuevamente el tema del sexo entre personas de cierta edad y explota el tópico de hombres mayores divorciados y casados con mujeres más jóvenes, pero infelices. El trío protagonista está muy bien, Alec Baldwin, Meryl Streep y Steve Martin, y nos hacen pasar un rato agradable. No hay más.

Criaturas celestiales


Película de 1994 basada en los hechos reales que conmocionaron Nueva Zelanda en 1954 sobre el asesinato de una madre por su hija y su amiga. El director, Peter Jackson, cuenta la historia que condujo a dicho suceso centrándose en la relación de las dos adolescentes. Retrata a los dos muchachas como personas inteligentes, creativas e imaginativas (bastante fiel puesto que hizo un gran trabajo de investigación, y una de las chicas es la exitosa escritora Anne Perry) que fueron elevando su relación de amistad hasta la homosexualidad, lo que asustó a los respectivos padres que planearon separarlas. La hija de la víctima escribía un diario, por lo que su descubrimiento por la policía el mismo día del asesinato esclareció todo el asunto. Jackson utiliza bastante material del mismo de una manera textual para darle más rigor. Refleja cómo las dos protagonistas crearon un mundo paralelo en el que eran felices, alejándose de los sinsabores de la realidad y la incomprensión que sufrían. Toda esa magia se rompe con el extraordinariamente frío plan y posterior asesinato. Tiene un buen guión y un montaje muy inteligente que realza ese mundo imaginario. La selección musical es maravillosa, usando extractos de óperas que le dan mayor intensidad a las imágenes. Y lo mejor es la interpretación de las dos jóvenes, las debutantes Kate Winslet y Melanie Linskey.
El inconveniente que le encuentro es que se le da demasiado peso a dar vida a las imaginaciones de las chicas y no tanto al drama que sufren (y crean) a su alrededor, hasta el punto de planear y ejecutar un plan tan macabro. Creo que se ha desaprovechado un poco la historia.
En resumen, endulzado relato para un espeluznante asesinato.

La loba

Obra maestra del genial William Wyler de 1941. Se trata de un impresionante drama en torno a un grupo de tres avariciosos hermanos liderados por una egoísta y ambiciosa mujer, brillantemente encarnada por Bette Davis. La trama se desarrolla unos años después de la guerra de Secesión americana, cuando algunos industriales del norte buscaban oportunidades de expansión en el sur. Allí residen los hermanos Hubbard que no quieren perder la ocasión para enriquecerse a costa de explotar a sus conciudadanos pero necesitan dinero para la inversión, el cual pretenden conseguirlo del marido de la hermana interpretada por Davis. Está basada en la obra de teatro de Lilliam Hellman, quien la adapta para la gran pantalla con un espléndido guión. Wyler hace un trabajo magistral y da una auténtica lección de cine: la definición de los personajes, los movimientos de cámara, los planos y encuadres (hay tomas y escenas de una belleza impresionante), la situación y movimientos de los actores, etc. También es extraordinaria la labor del director de fotografía, Gregg Toland, usando inteligentemente la luz y con una profundidad de campo comparable tan sólo a Ciudadano Kane. En cuanto a los actores, Bette Davis da un recital de interpretación en su papel de fría y calculadora esposa y hermana. Tanto cuando habla como cuando calla, de frente y de espaldas, lo dice y transmite absolutamente todo. Le acompañan otros grandes actores como Herbert Marshall (el enfermo marido), Charles Dingle (el hermano soltero y al frente de los negocios), Dan Duryea (el ingenuo sobrino Leo), Teresa Wright (la inocente hija que va dándose cuenta de la realidad),... También son excelentes la dirección artística, el montaje, la banda sonora y el vestuario.
Película que hay que ver. Una joya.

jueves, 26 de agosto de 2010

Perros de paja

Dura y violenta película realizada en 1971 por Sam Peckinpah basada en la novela "The siege of Trencher´s farm" de Gordon M. Williams. Relata la historia de una pareja que regresa al pueblecito de Gran Bretaña de donde procede ella para que él, un astrofísico norteamericano, pueda trabajar en una investigación que está desarrollando. Pero no encuentran esa deseada tranquilidad y se ven arrastrados en una espiral de violencia.
Peckinpah es conocido por su escasa sutileza y en ser pionero en mostrar la violencia del ser humano en toda su crudeza. Aquí hace un trabajo brillante creando desde la primera toma una atmósfera que va envolviendo al recién llegado y pacífico americano hasta que explota. Se vale de una inquietante historia y, sobre todo, de un soberbio trabajo de montaje que incrementa exponencialmente la tensión en el espectador. Domina los movimientos de cámara, transmitiendo aún más brusquedad y rudeza a las escenas. Los actores están magníficos, especialmente Dustin Hoffman, quien sabe transmitir a la perfección cómo sus nervios van agotándose y cómo se siente en cada momento. A Hoffman lo acompañan un buen grupo de actores. También hay que destacar la banda sonora que acompaña espléndidamente a la acción y una gran ambientación (inmejorable la localización). El único pero que encuentro es el poco creíble entorno que se encuentran: un pequeño pueblo lleno de holgazanes, tarados, pervertidos y borrachos.
Todo un clásico que hay que ver salvo que se quiera evitar escenas explícitas y contenidos de violencia

miércoles, 25 de agosto de 2010

Pánico en la escena

Obra poco conocida de 1950 del maestro Hitchcock que, a pesar de corresponder a su etapa americana, está rodada en Londres y con actores británicos (a excepción de Jane Wyman y Marlene Dietrich). El genial director impregna toda la cinta con su estilo: suspense con toques de humor basados en ironías, sutilezas, malentendidos y confusiones. Nos presenta a un falso culpable, algo que le encantaba, que ha caído en manos de una mujer fatal (que además es actriz y cantante, por lo que la Dietrich encaja a la perfección) y se apoya en una joven enamorada de él para ocultarse. El maestro juega con nosotros aumentando y bajando la tensión a su antojo, alargando los momentos más críticos, torciendo los diálogos, y dándonos las claves con cuentagotas para mantenernos enganchados. La trama da algún giro que nos pillará por sorpresa e incluso nos hará plantearnos lo que ya hemos visto. Los actores están bastante bien, con espléndidos secundarios, y hay que destacar el guión y la banda sonora.
Sin embargo no llega a la altura de otras de sus obras. Tiene un buen arranque, pero luego pierde algo de ritmo que recupera pasada la primera media hora. También hay alguna situación de enredo más confusa y larga de lo necesaria. Y aunque el final fue muy criticado porque se suponía que había engañado al espectador con la presentación de los hechos, no lo comparto y me parece muy bueno.
En resumen, buena película de intriga que nos hará pasar un buen rato, aunque flaquee en algún momento.

martes, 24 de agosto de 2010

Los sobornados

Extraordinaria película de 1953 dirigida por el maestro Fritz Lang. Aunque constituye un excelente ejemplo de cine negro, no es la clásica historia en busca del asesino puesto que en la primera escena lo vemos y la policía lo tiene igual de claro que nosotros. El sargento encargado del caso está a punto de cerrarlo pero aparece un hilo suelto y, por querer atarlo bien, se va encontrando con toda una madeja. Una historia muy intrigante sobre crimen y corrupción basada en la novela homónima (al recopilar el serial para un periódico) de William P. McGivern que causó en su tiempo bastante impacto. Usando este material, Sydney Boehm hace un guión soberbio definiendo muy bien unos personajes que se debaten entre hacer lo correcto o lo seguro y más cómodo. Tiene unos diálogos inteligentes y nos deja algunas frases inolvidables.
El protagonista absoluto es Glenn Ford y nos deja una de sus mejores interpretaciones. Sosegado aunque duro, sensible pero tajante, transmitiéndonos por lo que va pasando durante la investigación. Junto a él brillan Gloria Grahame y un joven Lee Marvin, junto a otros buenos secundarios. Lang le da un ritmo narrativo espléndido y claro a la trama, enganchándonos desde la primera toma. Como curiosidad, hace un simpático guiño a Gilda usando la famosa melodía "Put the blame on mame" una vez de las que Ford está en el bar de copas.
Una película que hay que ver y que no defraudará, disfrutando de algunas escenas memorables y de una trama poco corriente.

jueves, 12 de agosto de 2010

Las tres noches de Eva


Simpática película de 1941 dirigida por Preston Sturges utilizando un guión firmado por él mismo. Es una comedia de enredo, falsas identidades, timos, venganzas y amor, que es el que finalmente lo domina todo y puede con todos. El guión es ágil y contiene frases ingeniosas y mordaces, y también incluye algunas escenas un poco locas y absurdas. La protagonista principal es Barbara Stanwyck, con un papel hecho para su lucimiento. Está perfecta en sus múltiples facetas de timadora, encantadora de serpientes (seductora), y dama de la alta sociedad. La pobre víctima es Henry Fonda, quien encarna estupendamente al ingenuo e inocente ricachón. Les acompañan unos estupendos secundarios como Charles Coburn, Melville Cooper, Eugene Pallette, etc. Tiene una bella partitura y un magnífico vestuario.
En definitiva, una comedia romántica de enredo entretenida.

Mystic river


Inquietante película del maestro Clint Eastwood (esta vez sólo detrás de la cámara) realizada en 2003. Utiliza una trama típicamente de intriga (la investigación de un caso de asesinato) para rodar un drama basado en unos personajes, un trío de amigos de la infancia, marcados por un desgraciado suceso. Retrata a todas las personas que participan, tanto los tres amigos como los que les rodean, con gran realismo y una incomparable fuerza emocional. El tema de fondo es duro, los protagonistas han sufrido y sufren traumas, y la historia que sirve de hilo argumental es desgarradora.
Eastwood hace un gran trabajo de dirección utilizando un estupendo guión basado en la novela homónima de Dennis Lehane (también autor de Shutter Island y Gone baby gone). Capta magistralmente los tormentos de cada personaje, dibuja a la perfección el entorno que les rodea, e inquieta al espectador sobre el final que se acerca. Cuenta con un grupo de actores impresionante: Sean Penn, Kevin Bacon, Tim Robbins, Eli Wallach, Laurence Fishburne, Laura Linney, Marcia Gay Harden,... Grandes actores a los que el maestro les sabe sacar todo el jugo interpretativo.
Una soberbia película de intriga que retrata un drama bastante duro.

miércoles, 11 de agosto de 2010

Los vikingos

Estupenda película de aventuras realizada en 1958 por Richard Fleischer basada en la novela homónima de Edison Marshall. Recoge la forma de vida de los vikingos que atemorizaban a los pueblos costeros de Inglaterra, contando la relación entre dos hermanos de padre que se odian pero que tienen que colaborar para rescatar a la mujer que ambos aman. El director recoge esa bárbara forma de vida que llevaba este pueblo contando esta historia de amor y odio que nos atrapará desde el inicio. Tiene unas localizaciones magníficas, una buena ambientación de la época, una preciosa banda sonora y unos buenos intérpretes. Kirk Douglas y Tony Curtis están estupendos y transmiten todo el odio que sienten el uno por el otro, aunque con diferentes personalidades, exagerado y brabucón el primero frente a contenido y sagaz el segundo. Les acompañan estupendos secundarios como Ernest Borgnine, Janet Leigh y James Donald.
Fleischer hizo un gran trabajo de investigación para reflejar fielmente las costumbres y cultura de los vikingos, haciendo incluso "copiar" los barcos que se habían encontrado hundidos a escala real. Deja varias escenas para la historia del cine, como la de Kirk Douglas saltando por los remos mientras escuchamos la bella música compuesta por Mario Nascimbene y vemos de fondo los increíbles paisajes de los fiordos.
Sin duda, una de las mejores películas de aventuras de todos los tiempos.

Sherlock Holmes en Washington

Otra entrega de las aventuras del famoso detective creado por Sir Arthur Conan Doyle, dirigido por Roy William Neill (de la casi docena que hizo sobre este personaje) y protagonizado por Basil Rathbone. En esta ocasión presentan la aventura de una manera más directa, siendo el espectador testigo de lo que ha ocurrido en vez de escucharlo cuando piden ayuda al genial investigador (antes o después de suceder los hechos). Holmes empieza a intervenir cuando ha desaparecido un agente secreto británico en suelo norteamericano en posesión de unos valiosos documentos y las autoridades inglesas así se lo solicitan. Es una aventura entretenida y con un toque de humor al estilo Hitchcock (vemos cómo pasan los documentos de mano en mano sin que nadie se dé cuenta), aunque esta vez no hay supuestas componentes sobrenaturales detrás de los hechos y se trata de un caso clásico de espionaje (no es el típico caso que resuelve el inquilino del 221B de Baker Street). Cuenta con un buen guión que despierta el interés del espectador al enseñarle lo que ha pasado pero no desvela inmediatamente quién y cómo tiene los documentos, y luego va construyendo el caso para Holmes de manera lógica pero no siempre creíble del todo. Como es habitual, Rathbone hace un buen trabajo aunque no llega a la altura de otras entregas, y el Dr. Watson, interpretado por Nigel Bruce, es excesivamente torpe y aporta algunos detalles cómicos a la acción.
En resumen, película de espionaje entretenida y realizada correctamente.

martes, 10 de agosto de 2010

Tempestad sobre Washington

Extraordinaria película de 1962 dirigida por Otto Preminger sobre las dificultades que encuentra el presidente de los EE.UU. para que el Senado ratifique a la persona que ha elegido como Secretario de Estado. Sin duda, uno de los mejores ejemplos de cine sobre el mundo de la política. Se centra en la investigación que abre el senado para asegurarse que el elegido para dicho cargo es digno y tiene un pasado inmaculado. Sin embargo, turbios manejos políticos van sacando a la luz diferentes hechos que afectarán a más personas de lo esperado.
Preminger dirige magistralmente esta obra basada en la novela homónima de Allen Drury y por la que ganó el Pulitzer en 1960. Sabe definir bien los personajes sin llevar al espectador a la confusión, consigue dosificar la trama para fijarnos a nuestro asiento (sabremos antes que nadie que el nominado oculta algo pero luego desvela lentamente los secretos de éste y otros personajes), administra sabiamente los ingeniosos discursos políticos para no caer en monólogos o verborreas aburridas, y nos ofrece unos planos y escenas maravillosas. Se basa en dos pilares: un magnífico guión y un grupo de excelentes actores. El guión es de Wendell Mayes, quien ya había trabajado con Preminger en la estupenda Anatomía de un asesinato, y adapta genialmente la novela para el celuloide. En cuanto al impresionante reparto, cuenta con Henry Fonda, Charles Laughton, Walter Pidgeon, Gene Tierney, Lew Ayres, Don Murray, Burgess Meredith, Franchot Tone, Peter Lawford... Todos están maravillosos, pero destacaría al hábil líder de la mayoría, Walter Pidgeon y a los protagonistas de la trama, Fonda (sólo con su presencia transmite la seriedad y honradez que se busca) y Laughton (en un papel cínico e ingenioso que le va como anillo al dedo).
Por todo ello no hay que perdérsela. La dos horas y cuarto que dura se nos pasarán volando.

La reina


Estupenda película de Stephen Frears realizada en 2006 sobre los eventos que sucedieron a la trágica muerte de Diana de Gales. Se centra en las diferentes formas de afrontar dicho suceso, viéndolo por un lado como un asunto privado de la familia según la propia reina y, por otro, como un fallecimiento de un miembro de la familia real según Tony Blair y el príncipe Carlos (apoyándose en el clamor popular). Tiene bastante rigor, aunque tomándose algunas licencias. Frears hace el relato con enorme respeto, dejando siempre a los niños de lado y poniendo toda su atención en la situación por la que pasa la reina, quien acaba reconociendo no entender del todo lo que sucede. Vemos a Tony Blair aprovechando para ganar aún más popularidad pero intentando ayudar a su majestad.
El director sabe captar lo que piensa y siente cada personaje, haciendo un análisis profundo pero entretenido de una de las peores semanas para la casa real británica. Se apoya en un excelente guión que seduce de principio a fin al espectador y, sobre todo, en la extraordinaria encarnación de Helen Mirren como su alteza la reina Isabel II. Está magistral, y vale la pena escucharla sin doblaje para apreciar sus trabajados acento y entonación. Muestra el lado más humano e incluso la vulnerabilidad de la reina, aunque queda claro que tiene buena intención y enorme experiencia. Otras buenas interpretaciones son las de James Cromwell (como el marido de la reina que menosprecia continuamente la reacción del pueblo), Sylvia Syms (la consejera reina madre), Alex Jennings (el poco valiente príncipe) y Michael Sheen (el despierto primer ministro).
Muy recomendable para entretenernos y recordar un pasaje reciente de Historia.





Resacón en Las Vegas


Comedia de 2009 que disfrutó de un enorme e inesperado éxito. Narra las aventuras y desventuras de cuatro amigos celebrando una despedida de soltero en Las Vegas. Tras levantarse de la gran fiesta, no recuerdan nada y han perdido al novio, por lo que se dedican a buscarlo intentando descubrir qué hicieron esa noche. En general, es una comedia no adecuada para menores con cierta gracia en cuanto a las barbaridades de la fiesta pero buscando el humor fácil referente al sexo, drogas, delitos, etc. Lo mejor es el pequeño papel de Mike Tyson donde demuestra su capacidad de reírse de sí mismo (parodia un conocido anuncio de chocolates Cadbury protagonizado por un gorila). Para asegurarse las situaciones extravagantes, uno de los amigos es muy peculiar, otro sufre en su relación sentimental, y otro es un juerguista. En resumen, es la historia de una juerga desmedida.

lunes, 9 de agosto de 2010

Una pareja de tres

Bonita comedia de 2008 dirigida por David Frankel tras su exitosa El diablo viste de Prada. Está basada en la autobiografía del periodista John Grogan que adquirió fama con una columna que escribía sobre las aventuras que vivía con su perro y que, tras la desaparición del animal, decidió convertir en un libro. El director cuenta esta historia con un buen ritmo narrativo, dotando de gran realismo lo que va sucediendo entre la pareja ante sus sucesivos cambios de situación familiar. Cuenta con una buena pareja protagonista entre la que hay química, Jennifer Aniston y Owen Wilson, además de espléndidos secundarios (Kathleen Turner como la dura entrenadora de perros, Alan Arkin con el sobresaliente papel de jefe-consejero matrimonial, y Eric Dane en su habitual papel de mujeriego). También tiene una buena banda sonora de la mano de Theodore Shapiro que incluye varias conocidas y bien elegidas canciones. El resultado es una agradable comedia apta para toda la familia que nos hará reír, emocionarnos, y hasta ponernos tristes. Odiaremos y amaremos por partes iguales al perro (llegaron a utilizar 24 labradores distintos para rodar los 14 años de vida que tuvo). Encantadora.

Los viajes de Sullivan

Película de 1941 dirigida por Preston Sturges y que está a medio camino entre la comedia y el drama, satirizando algunos aspectos de la sociedad americana de la época e intentando crear conciencia positiva (especialmente, sobre el educativo papel del cine o, al menos, evasivo de la realidad). Parte de un buen argumento que podría haber sido una excepcional plataforma para una gran comedia: un famoso y rico director de Hollywood que quiere conocer la pobreza y miseria para rodar una película. Y así parte la cinta, como una screwball comedy, con escenas alocadas y absurdas. Pero tras la primera media hora, se centra más en el drama de la pobreza, la sátira sobre la vida acomodada de los ricos, y hasta el maltrato en las prisiones. En tan sólo 90 minutos vemos todo eso, lo que puede dejarnos un poco desconcertados. El guión no tiene la fluidez, el ingenio y la agudeza de otros de este gran director y guionista. Joel McCrea está bien en su difícil papel "todoterreno" y Veronica Lake está para lucir palmito y poco más. Lo mejor es el bonito mensaje que deja: la risa nos hace a todos iguales y nos hace olvidar lo miserable de nuestra existencia.
Por todo ello, es una película un poco extraña que no deja indiferente a nadie. Personalmente, prefiero que temas tan opuestos sean tratados separadamente y con más profundidad.

domingo, 8 de agosto de 2010

Sherlock Holmes contra Moriarty

Otra entrega de las aventuras del famoso detective creado por Sir Arthur Conan Doyle protagonizada por un buen Basil Rathbone en 1939. En esta ocasión la película no alcanza el nivel de otras de la serie, no tanto por la trama que realmente es interesante sino por la realización. El argumento es bueno y capta la atención del espectador al ver cara a cara a Sherlock Holmes con su admirado enemigo el profesor Moriarty, y cómo éste idea un ambicioso plan para dejar al detective en una vergonzosa posición profesional. El problema es que el director, Alfred L. Werker, no dota de un ritmo apropiado la narración y tampoco sabe explotar la presencia del malvado delicuente para crear más emoción (de hecho, fue la única película sobre Holmes que dirigió). El desarrollo de los acontecimientos es un poco superficial haciendo que perdamos el interés por los sucesos. También el guión adolece de algunas lagunas y no llega a definir bien los personajes que protagonizan los hechos. Como ocurre en esta serie de Holmes, nos presentan a un torpe Dr. Watson que añade algunas notas cómicas a la cinta.
En definitiva, capta nuestra atención por la trama pero vamos perdiendo el interés inicial conforme pasan los minutos. Aún así, es entretenida para los aficionados al personaje, aunque no es la más afortunada adaptación de las aventuras del famoso detective.

Arde Mississippi

Impresionante película de 1988 que narra los hechos sucedidos en 1964 en el estado de Mississippi. Denuncia la situación en que vivían los negros en algunas poblaciones de los Estados Unidos tan sólo dos décadas antes de rodarla. La trama es dura pero es tratada por su director, Alan Parker, con suficiente distancia aunque tome partido en el asunto. Hace un excelente trabajo, presentando por un lado los hechos (como protesta social) y, por otro, haciendo de la investigación una intriga que interese al espectador. No cae en generalizar el racismo mostrando a personas que no lo comparten e incluso intentan en vano explicarlo. Pone al frente de la investigación a dos agentes pertenecientes a dos escuelas opuestas, la Universidad y el respeto absoluto de los procedimientos frente a la carrera policial de calle y jugando con las reglas que sean necesarias en cada terreno. El primero es encarnado por un soberbio Willem Dafoe, comedido e idealista, y entregado a cambiar la sociedad. El segundo es interpretado excelentemente por Gene Hackman, impulsivo, conocedor de las personas y costumbres del sur, y con menos aprecio a los procedimientos formales. Les acompañan un buen número de espléndidos secundarios: Frances McDormand (la inolvidable sheriff de Fargo), Brad Dourif (el repelente Lengua de Serpiente de El señor de los anillos), Stephen Tobolowski, etc. Además, de la dirección, guión (hay algunos diálogos excelentes entre policías y en las entrevistas con la población) y las interpretaciones, hay que destacar la gran labor de vestuario y dirección artística, pues recrearon la época y población con gran realismo. El montaje también sobresale, especialmente en la mezcla de imágenes con discursos o cánticos de los negros. Por último, la banda sonora de Trevor Jones añade más ritmo y tensión a la historia.
Gran película que no olvidaremos por lo que cuenta y por cómo lo cuenta.

sábado, 7 de agosto de 2010

Winchester 73

Magnífico western de 1950 dirigido por uno de los maestros del género, Anthony Mann. Narra una historia de venganza siguiendo las aventuras de uno de los objetos de deseo de la época, un arma perfecta: un winchester 73. Todos los pistoleros la desean, y en su presencia pierden la cabeza por poseerla (parecido al anillo único en El señor de los anillos). Contiene todos los elementos típicos de estas películas: venganza, caballos, armas, diligencia, asalto a un banco, traficantes de armas, indios, el séptimo de caballería, chica de saloon, desierto con cactus, etc. Pero no se queda en los tópicos y muestra una historia sólida con grandes personajes. Todo ello gracias a un magnífico guión y a la sabia dirección del maestro. Ayuda enormemente la gran interpretación de su protagonista, James Stewart, que a pesar de no tener un físico que ayude en este género hace un trabajo excelente. También cuenta con magníficos secundarios como Dan Duryea, Shelley Winters y Millard Mitchel. Como anécdota vemos la primera aparición en la pantalla de dos grandes actores: Rock Hudson interpretando al jefe indio (toda una sorpresa) y a Tony Curtis (en los créditos aparece como Anthony).
Muy entretenida, uno de los mejores ejemplos del género.

Un marido rico

Comedia romántica (y "des-romántica) de 1942 dirigida por Preston Sturges. Trata de una manera fría y valiente para la época sobre las conveniencias de los matrimonios por dinero, especialmente elegidos y dirigidos por señoritas de buen ver. La protagonista está casada con el hombre al que ama pero que tras varios años de matrimonio no consigue triunfar en el mundo de los negocios. Así que piensa que hay que ser prácticos y separarse para que ella pueda buscar un marido rico antes de que empiece a perder sus encantos.
Está protagonizada brillantamente por Claudette Colbert, quien demuestra tener un buen registro para la comedia. Le acompañan a buen nivel Joel McCrea, Mary Astor y Rudy Vallee. El guión es muy bueno, conteniendo casi en la misma proporción diálogos de gran ingenio y escenas alocadas (al estilo screwball comedy). Hay varias frases que son de lo más divertido que encontraremos en el cine y que retendremos por mucho tiempo en nuestra memoria. Sturges otorga a las mujeres toda la iniciativa en el terreno amoroso y muestra a los hombres como sus inocentes presas. Da una visión cínica del capitalismo y de las clases más adineradas.


Shutter Island

Gran thriller psicológico de 2010 dirigido por Martin Scorsese que gira en torno a los misterios que encierra una isla-hospital psiquiátrico. La primera hora es excelente, creando un clima que agobia al espectador que le produce terror y desasosiego. Magníficos el guión, la dirección y la música que aumenta la tensión hasta el límite. Luego el argumento da varios giros que alimentan la duda en el espectador sobre lo que está ocurriendo. En la última media hora pierde aún más ritmo y se centra en los tormentos del protagonista.
En general hay que hablar de una cinta muy interesante, que junto a lo ya mencionado destacan las interpretaciones. Por encima de todos está Leonardo DiCaprio, reflejando perfectamente el sufrimiento por el que está pasando. Acompañan adecuadamente Ben Kingsley, Max Von Sydow y Mark Ruffalo. El único "pero" es que se generan muchas expectativas tras la sobresaliente primera parte (realmente impresionante).

viernes, 6 de agosto de 2010

Laura

Extraordinaria película de 1944 dirigida por el gran Otto Preminger. Nos entrega esta vez una historia de cine negro, la investigación del asesinato en extrañas circunstancias de una señorita que ha alcanzado el éxito profesional y que enamora rápidamente a los hombres a su alrededor. El detective, encarnado espléndidamente por Dana Andrews, va haciéndose una idea de cómo era ella y, con la ayuda del retrato que hay en su casa, se va enamorando irremediablemente de la víctima. El caso es complicado pues los testimonios de los sospechosos no aclaran la situación y se van produciendo algunos acontecimientos que lo hacen aún más difícil.
El guión, basado en la novela homónima de Vera Caspary, es una joya. Presenta la investigación en tiempo real y añade flash-backs para que vayamos conociendo a Laura (a la vez que el detective). Tiene buen ritmo narrativo y dibuja unos personajes estupendos, dotándoles de gran profundidad y carácter. Gene Tierney enamora a todos con su interpretación de Laura, dejándonos alguna escena inolvidable. Y aunque buena, tierna y encantadora, siempre tendremos recelos de ella y pensaremos que ha estado involucrada de alguna manera en el asesinato. Pero la mejor interpretación es la de Clifton Webb, como el ácido Waldo Lydecker, con un gran repertorio de clase y sarcasmo. Acompañan dos secundarios de auténtico lujo como un joven y enorme Vincent Price y la siempre enigmática Judith Anderson (la inolvidable ama de llaves de Rebecca).
Una maravilla en muchos sentidos que hay que ver.

La garra escarlata

Otra aventura del personaje creado por Sir Arthur Conan Doyle realizada en 1944 y protagonizada por un gran Basil Rathbone. Se trata de la investigación de unos hechos sorprendentes ocurridos en una aldea de Quebec, Canadá, y que la población cree que se deben a algo sobrenatural debido a una leyenda de más de 150 años. Por supuesto que Sherlock Holmes no acepta ninguna explicación fuera de lo racional (como él siempre decía, con los hechos en la mano había que descartar las explicaciones imposibles para quedarse incluso con las improbables) e investiga el asunto ya que se encuentra cerca por casualidad.
La película es de gran calidad, con una buena dirección, guión, fotografía e interpretaciones. Nos presentan muy bien la historia, tanto que parece que a mitad del metraje ya se va a acabar porque "lo sabemos todo" pero se mantiene la investigación e intriga hasta el final. Rathbone es, sin duda, de los mejores Holmes que hemos visto en la pantalla, pues le da carácter al personaje pero sin necesidad de caer en aspavientos. Nigel Bruce, como el Dr. Watson, aporta unos tintes cómicos que la hacen aún más amena, presentando un torpe compañero para el genial detective.
Muy entretenida, nos mantiene intrigados durante los escasos 75 minutos que dura.

Memento

Intrigante película del año 2000 que supuso el lanzamiento de su director y guionista, Christopher Nolan. Narra la historia de un hombre que quiere encontrar al asesino de su mujer y que le golpeó a él causándole una enfermedad que le incapacita para crear recuerdos desde ese momento. Tiene un planteamiento muy original y del que sale con éxito gracias a la perfección de su guión, montaje y dirección, pues es una apuesta arriesgada que podría hacer que el espectador perdiera el hilo argumental. La trama tiene dos hilos narrativos, uno principal en color y que es contado hacia atrás (cronológicamente) y otra en blanco y negro y contada en sentido tradicional. La principal parte del final y, paso a paso (foto a foto, que es el soporte que utiliza el protagonista para seguir las pistas del crimen que trata de resolver), va hacia atrás en el tiempo hasta que enlaza con la parte secundaria. Es decir, vemos al inicio cómo ha concluido su investigación y vamos descubriendo cómo ha llegado a esa conclusión.
Nolan transmite perfectamente la agonía y desasosiego que vive el protagonista, y va desgranando la trama creando una enorme expectación en el espectador que quiere saber todo lo que está pasando y no termina de entender. El protagonista, Guy Pearce, encarna perfectamente al desgraciado enfermo y ayuda a Nolan a crear esa atmósfera de intriga, desconfianza y agitación.

jueves, 5 de agosto de 2010

Testigo de cargo

Obra maestra del genio Billy Wilder realizada en 1957 tomando la trama de la novela homónima de Agatha Christie. Sin duda, la mejor adaptación de las novelas de la gran dama del suspense. La historia es magnífica, y Wilder la adapta con maestría dosificando la intriga, haciendo que la emoción vaya creciendo hasta el magnífico desenlace final que nos deja sorprendidos y hace que revisemos rápidamente la película en nuestra cabeza para encajar todas las piezas.
Wilder vuelve a hacer un doble papel, como guionista (junto a Harry Kurnitz) y como director, bordando ambas tareas. El guión es perfecto, definiendo a unos soberbios personajes, presentando la trama, creando el nudo y posterior desenlace, con unos diálogos inolvidables y con escenas realmente memorables. Sabe dónde colocar mejor la cámara, cómo hacer los movimientos o dejarla quieta para transmitir mejor lo que sucede, explota a los actores, etc. Precisamente las interpretaciones son otro de los pilares de la obra. El mejor sin duda es Charles Laughton, con su impresionante encarnación del sarcástico, cínico pero genial abogado defensor. Desde su aparición engancha al espectador con sus gestos y su genio (en todos los sentidos). Los otros dos protagonistas también están espléndidos, Tyronne Power y Marlene Dietrich, y cuenta con varios secundarios de lujo, empezando por la fantástica Elsa Lanchester (la paciente enfermera que nos hará reír por las peleas que mantiene con el abogado), Una O'Connor (el ama de llaves cascarrabias), Torin Thatcher, John Williams, etc. Cuenta con una extraordinaria fotografía en blanco y negro de la mano de Russell Harlan.
Una película que hay que ver para disfrutar del mejor cine y que nos hará pasar dos estupendas horas.

Adiós Mr. Chips

Magnífica película de 1939 y, posiblemente, la mejor de las basadas en el mundo de la enseñanza. Narra la vida de un profesor de internado desde que llega como profesor novato hasta el final de sus días, siendo testigos de sus diferentes maneras de abordar la educación de los niños y adolescentes a su cargo. El director, Sam Wood, que había dirigido dos de las mejores películas de los hermanos Marx (Una noche en la ópera y Un día en las carreras), hace un extraordinario trabajo alcanzando un punto óptimo entre la comedia y el drama. El montaje, incluyendo el sonoro, es magnífico, al igual que la fotografía (considerando el año de que se trata). Y un pilar vital para el éxito de la cinta es la inolvidable y entrañable interpretación de Robert Donat como Mr. Chips. Lo vemos encarnar al querido profesor durante más de 60 años, y siempre con gran realismo y ternura. Sin duda y gracias a este actor, uno de los personajes más recordados de la historia del cine. También hay que mencionar la participación de Greer Garson (la inolvidable Elizabeth Bennet y Mrs. Miniver), como la persona que hizo ver el alcance e importancia de la educación al protagonista. El guión es espléndido con grandes escenas y diálogos, y con ingeniosos recursos para transmitir el paso del tiempo repasando algunos de los hechos históricos de la época. Dibuja deliciosos personajes que permanecerán por mucho tiempo en nuestra memoria.
Sin duda, una película que hay que ver. Nos hará reir, nos emocionará y nos cautivará.

miércoles, 4 de agosto de 2010

La proposición

Divertida comedia romántica de 2009 versioneando el tema de Matrimonio de conveniencia. Es una típica historia de amor, con el citado tema, pero tiene gancho. Es decir, que aunque es previsible y la historia ya la hemos visto, nos gustará porque está bien rodada, con decentes interpretaciones y un guión que nos deja divertidas escenas. Tanto Sandra Bullock como Ryan Reynolds encarnan bien sus opuestos papeles y hay química entre ellos, y tenemos ocasión de ver a la entrañable Betty White (Rose de Las chicas de oro). Hay alguna escena un poco más tonta de lo necesario, pero aún así es una comedia fresca y entretenida.

The reader

Adaptación de la novela homónima de Bernhard Schlink y llevada a la pantalla de la mano de Stephen Daldry en 2008. Se trata de un romance (el descubrimiento del amor por parte de un adolescente) y drama judicial con el holocausto nazi como telón de fondo. Toca ambos temas pero demasiado superficialmente. La primera parte narra la relación entre un adolescente y una señorita metida en la treintena, con una componente sexual muy marcada. Personalmente me parece poco creíble esta parte tal y como nos la cuentan. Aunque pretenden transmitir algo más, se quedan casi en lo físico. La segunda parte y más interesante, se centra en el juicio por unos hechos sucedidos al final de la II Guerra Mundial. Es donde Kate Winslet se luce más, aunque está muy bien durante toda la película. Finalmente hay una tercera parte donde se cuenta los tormentos que sufre aquel muchachito del principio, con un gran Ralph Fiennes. Tiene una bella fotografía a lo largo de toda la cinta.
Así pues, no consigue transmitir todo lo que podía (en el libro, por ejemplo, trata con más profundidad de los sentimientos de culpabilidad del pueblo alemán) ni de una parte de la trama ni de la otra. Aún así, la última hora es entretenida por el tema que trata.

martes, 3 de agosto de 2010

Marathon man

Interesante thriller de 1976 dirigido por John Schlesinger que nos mantiene enganchados desde el principio hasta el fin. Durante la primera hora vemos una serie de sucesos que nos van intrigando pero que no conseguimos encajar (al igual que el propio protagonista). Es un buen ejemplo de ir "in crescendo", con cada vez más tensión, con el protagonista metido en unos sucesos que le superan y no entiende, hasta que nos acercamos a un gran final. Tiene dos grandes pilares, además de la excelente realización: el guión y las interpretaciones. La trama no es complicada pero muy interesante, y es desarrollada con un guión inteligente que va desgranándola poco a poco y con espléndidos diálogos. Hay momentos en que no se sabe en quién se podría confiar y tiene algunas escenas que se fijarán en la retina por mucho tiempo (la frase "¿están a salvo?" ha sido votada como una de las más famosas de la historia del cine). El autor es William Goldman adaptando su propia novela (también autor de la famosa novela La princesa prometida y de extraordinarios guiones como Dos hombres y un destino o Todos los hombres del presidente). En cuanto a las interpretaciones, cuenta con soberbios actores que encarnan a los personajes maravillosamente. Sir Laurence Olivier borda su encarnación del Dr. Szell (por cierto, basado en en el Dr. Josef Mengele que fue director médico de las SS en Auschwitz) sabiendo transmitir absolutamente todo con su mirada y Dustin Hoffman realiza un gran trabajo metiéndose en la piel del desgraciado protagonista. Otros secundarios que también destacan son Roy Scheider y William Devane.
Para no perdérsela y disfrutar con buen cine de intriga.

La importancia de llamarse Ernesto

Adaptación cinematográfica de la novela homónima de Oscar Wilde realizada en 2002 de la mano del guionista y director Oliver Parker. Cuenta con un reparto de conocidos y buenos actores, aunque en papeles en los que ya los hemos visto con anterioridad. Destaca la siempre excelente Judi Dench, los correctos Rupert Everett, Colin Firth, Tom Wilkinson y Frances O´Connor, y una mediocre (en esta ocasión) Reese Witherspoon. La trama es entretenida, siendo la típica comedia británica, con personajes extravagantes y diálogos ingeniosos. Es divertida a pesar de un irregular comienzo.
La pena es que se ha quedado en la superficie de la obra. No aprovecha la ocasión como en la novela para criticar con más acierto la hipocresía de la sociedad inglesa de comienzos del siglo XX, con su sistema de clases de sociales y la importancia de las apariencias y el dinero. No dibuja con mayor profundidad los personajes que tanto potencial tienen, y aún más si consideramos los actores que los interpretan. El vestuario y la ambientación son un poco limitados, aunque tiene unas buenas localizaciones, especialmente las mansiones elegidas para rodar. Y la banda sonora distorsiona en ocasiones con las imágenes, por lo que no nos deja disfrutar de lo que vemos.
En definitiva, nos hace reír con los enredos y confusiones que puede provocar un nombre y con algunos de los personajes pintorescos que incluye, pero no explota todo el potencial que ofrece tan magnífica obra.

lunes, 2 de agosto de 2010

Pijama para dos

Comedia romántica de 1961 que intentaba explotar el éxito del trío Rock Hudson, Doris Day y Toni Randall de Confidencias a medianoche (y que posteriormente harían una tercera, No me mandes flores). Está bien dirigida por Delbertt Mann, dándole un enfoque de comedia de enredo y de guerra entre sexos. Tiene muchos golpes de humor gracias a un buen guión y unas buenas interpretaciones, destacando al ingenuo Randall. Nos enseña dos maneras de hacer negocios, una profesional y otra personal, todavía muy vigentes. Day interpreta a una mujer ejecutiva en un mundo de hombres, papel que ha quedado un poco desfasado hoy en día. También es llamativo el novedoso uso de la publicidad anticipada, aunque aquí sea un poco por accidente.
En resumen, una película simpática con humor inteligente y con una visión del mundo de los negocios aplicable en la actualidad.

domingo, 1 de agosto de 2010

X-Men 3: La decisión final


Tercera y supuesta última entrega (aunque están sacando precuelas) de la saga X-Men realizada en 2006, una de las mejores adaptaciones del cómic al celuloide. Sin embargo, ésta es la más floja de las tres, pues se queda en la mera acción y escenas espectaculares de la mano de numerosos mutantes. No tiene el fondo de los anteriores, en las que se reflejaban los problemas que tenían estos seres y la lucha personal y social en que se encontraban. Por lo tanto, la historia es mucho más superficial y el guión es bastante simple para poder centrarse en los efectos especiales y en las batallas. Incluso presenta numerosos mutantes con especiales "dones" que apenas se preocupan de explotar.
Dicho esto hay que reconocer que la película es entretenida si lo que se busca es sólo una distracción de poco más de hora y media, cine palomitero 100%. Tiene buenos efectos especiales que aumentan el potencial de las espectaculares escenas de acción, y más aún con los poderes de los mutantes. Ian McKellen y Patrick Stewart aportan algo de seriedad a la cinta, además de contar con los taquilleros Hugh Jackman y Halle Berry. También aparece un irreconocible Kelsey Grammer, el famoso doctor Frasier, en el papel de un mutante metido en política.