Película de 1995 dirigida por Michael Bay. Una pareja de detectives de narcóticos investigan un caso que avergüenza al departamento pues han robado un cargamento de heroína muy importante que tenían en custodia. Pero la situación da una vuelta de tuerca cuando los criminales matan a una colaboradora de ellos pero puede escapar una amiga que ha sido testigo de todo. Los asesinos no dudarán en acabar con quien sea por conseguir el objetivo de colocar la droga y obtener cientos de millones de dólares.
Divertida comedia de acción que combina el suspense policial con mucho espectáculo y humor. La fórmula funciona tanto como que están rodando la cuarta entrega casi 30 años después. La trama está bien pero no es muy distinta de la vista en muchas otras cintas, siendo la acción orquestada por el especialista Bay y, especialmente, el humor que aporta la pareja protagonista: Martin Lawrence y Will Smith. Especialmente el primero está centrado en aportar la diversión y tiene escenas y momentos bastante divertidos. Pero hay otros en el que se hace repetitivo y parece como que la película deja de fluir y se siente como un bajón del ritmo. En conjunto funciona como lo que es: cine palomitero entretenido.
Entretenida.
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