Película de 2020 dirigida por David E. Talbert. Un fabricante de juguetes vive un momento de éxito sin precedentes y es feliz con su esposa e hija. Su momento cumbre llega al darle la vida a un juguete mecánico que ha inventado pero el narcisismo sorprendente del muñeco junto con la avaricia del ayudante del inventor le cambian la vida. Le roban su libro de futuros juguetes para hacerle la competencia y le hunden tanto el negocio como su felicidad. Pasan los años hasta que la nieta del fabricante va a verle.
Cuento de navidad escrito y dirigido por Talbert que se inspira en Pinocho y en la época de Dickens para crear una historia visualmente muy potente y atractiva, con forma de musical. No se puede negar que hay mucho talento en la puesta en escena, el diseño de vestuario, la peluquería, la dirección artística,... para conseguir una obra de gran belleza visual y que atrape al espectador enseguida. Sin embargo, le falla la historia porque no tiene el encanto ni la gracia de otras cintas navideñas, lo cual es una pena. Tiene un arranque prometedor pero se queda en esa promesa, no se llega a tornar en un bonito cuento como uno pueda esperar ni le arranca risas por doquier. Los números musicales están bien pero no salvan el resultado. Cuenta con un protagonista de altura como Forest Whitaker.
Bien hecha pero no cubre las expectativas.
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