Película de 1999 dirigida por John McTiernan. En el siglo X un musulmán recibe el encargo de su califa de hacer de embajador en las lejanas tierras del norte y conocer nuevos pueblos. Realiza su viaje hasta entrar en contacto con un pueblo vikingo, totalmente bárbaro. Empieza cierta relación con ellos cuando reciben la visita de un chico de otro pueblo amigo que viene a pedir ayuda y responden mandando a 13 guerreros.
Adaptación de la novela Devoradores de cadáveres de Michael Crichton. Recuerda a cintas como Conan o Willow pero con el punto exótico de meter a un "civilizado" árabe entre los bárbaros (y sin llegar a la calidad de la primera). Este aspecto da lugar a momentos simpáticos que mejoran el resultado pues relajan la tensión que el misterio y la acción van produciendo. Es muy entretenida porque desde el principio van sucediendo cosas y tiene suficiente intriga y aventuras hasta el final, además de tener una duración de no más de hora y media. El reparto funciona bien con Antonio Banderas al frente. Hay escenas que muestran parcialmente los cadáveres que deja el misterioso enemigo por lo que puede herir la sensibilidad del espectador.
Muy entretenida.
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