Película de 2004 dirigida por John Moore. Tras recoger en una zona desértica de Mongolia a un equipo que exploraba la zona en busca de petróleo, un avión regresa a su base. Pero en el camino se encuentra una terrible tormenta de arena que acabará por tirar el avión y comenzar así una pesadilla para todos los que van en él.
Remake de la cinta de 1965 de Robert Aldrich sobre un grupo de "naúfragos" que se enfrentan a muchos dilemas en el desierto pero que se resumen en una cuenta atrás hacia una muerte segura. Tiene buenos efectos que hacen que la escena de la tormenta de arena y lo que conlleva sea espectacular. También cuenta con una buena localización y un reparto que funciona bien con el siempre solvente Dennis Quaid al frente y con secundarios como Giovanni Ribsi y Hugh Laurie. Por contra, el guion no está a la altura de ese primer cuarto de metraje y una vez en tierra las relaciones entre los personajes y sus conversaciones no tienen la naturalidad ni profundidad que deberían. Se ve que Moore se mueve mucho mejor en la acción que en el drama o el suspense. Con todo ello la película cumple su misión y hace pasar un buen rato al espectador.
Entretenida.
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