Película de 2018 dirigida por Spike Lee. Cuenta la historia real de un joven de color que se convirtió en el primer policía negro de Colorado Springs. Y unos años más tarde, en 1978, se infiltró en el Ku Klux Klan para investigar a este grupo desde dentro cuando descubrió sus movimientos en la ciudad.
Adaptación del libro Black Klansman de Ron Stallworth que cuenta su experiencia como policia infiltrado en el KKK a finales de los 70. Es una historia llamativa porque es muy reciente y cuesta creer el movimiento racista que aún existía en algunas zonas de los EE.UU. La cinta es irregular porque alterna buenos momentos con personajes y situaciones de calado con otros momentos más repetitivos y que no aportan gran cosa. Hay momentos del guion con diálogos muy interesantes pero no mantiene ese nivel con la suficiente consistencia. El reparto funciona muy bien con John David Washington y Adam Driver al frente del reparto y con algunos secundarios sólidos. Otro aspecto que le perjudica es que la mayoría de escenas parecen recordar otras películas e historias del mismo tipo. No obstante, nunca baja el interés ante la denuncia que supone.
Interesante.
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