Soy el número cuatro

Película de 2011 dirigida por D.J. Caruso. Un joven extraterrestre vive en nuestro planeta protegido por un guardián ya que es de los pocos que quedan de su especie junto con otros ocho. Aunque tienen poderes especiales aún no los controlan y son vulnerables a los ataques de sus enemigos que quieren aniquilarlos y lo están haciendo por orden, siendo el del chico el número cuatro. Cada vez que matan a uno lo siente, de ahí que cuando cae el tercero toman medidas para esconderse. Pero no pueden pasar desapercibidos.
Caruso lleva a los cines la adaptación de la primera novela de la saga Los legados de Lorien de Pittacus Lore. Por estética y parte de la historia recuerda a la exitosa saga Crepúsculo, pero en esta ocasión los protagonistas son alienígenas (unos "buenos" y otros "malos"), en lo que podría haber sido el comienzo de una saga pero que, al menos de momento, no se ha llegado a continuar. La parte visual está bastante cuidada y la trama tiene gancho, pero Caruso quiere seguir un poco el estilo de las cintas de acción adolescente como la ya comentada y desperdicia parcialmente lo que tiene entre manos. No explota todo el potencial de la historia y los personajes, haciéndola mucho más ligera y superficial y, con ello, de menos interés. Al final se queda en un producto entretenido con buenos momentos pero con escenas muy prescindibles.

Entretenida cinta juvenil.