Película de 2007 dirigida por Sam Raimi. Peter Parker vive un momento dulce porque es feliz con su novia, se luce en la universidad y toda la ciudad reconoce a Spiderman como el héroe que es. Pero todo empieza a torcerse porque ella pierde su trabajo, su mejor amigo se convierte en un villano, un criminal huído de prisión adquiere poderes descomunales y un extraño ser de otro planeta parece apoderarse de quien toca, incluído Spiderman. Parker tendrá que hacer frente a todo esto pero el enemigo más poderoso será él mismo.
Tercera entrega y más floja de la saga realizada por Raimi. Intenta seguir la misma fórmula que tan bien la había funcionado anteriormente pero no tiene la humanidad ni el sentido del humor de las otras. Quiere seguir poniendo el foco en las personas pero tan sólo remueve lo mismo, faltando más diversidad, intensidad y originalidad. Mantiene la acción casi al mismo nivel con buenas y espectaculares escenas, además de convertir al héroe en su propio enemigo (es lo mejor de la historia). En cuanto al humor, tiene alguna escena graciosa pero poco más, y basadas en el sentido del ridículo que le falta al protagonista. Cuenta con el mismo equipo de actores encabezados por Tobey Maguire, Kirsten Dunst y James Franco. En conjunto es una entretenida cinta de superhéroes apta para todos los públicos (salvo los muy pequeños por la violencia que tiene), mejor que muchas de las que se siguen estrenando pero sin llegar a la calidad de las dos entregas anteriores.
Entretenida y decente, pero no mantiene el nivel de la saga.
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